La Iglesia colombiana lamenta el anuncio del ELN de que retomará los secuestros
Como acompañante de las negociaciones, que debían proseguir este mes, la conferencia episcopal recuerda que «la privación de la libertad de personas no tiene justificación alguna»
Los acompañantes del diálogo de paz entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) lamentaron el pasado martes la decisión de la guerrilla de dar por terminada la suspensión de los secuestros con fines económicos. Tanto la Delegación para las Relaciones Iglesia-Estado Colombiano como el representante especial del secretario general de Naciones Unidas en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, llamaron al grupo armado a poner fin a esta práctica.
En un comunicado conjunto, lamentaron «la decisión anunciada el día de ayer 6 de mayo del 2024 en la que el ELN da por terminada la suspensión unilateral de lo que denominan “retenciones económicas”». Reiteraban que «la privación de la libertad de personas no tiene justificación alguna y es un flagelo deplorable que atenta contra la dignidad humana y lastima la conciencia de toda la nación colombiana». Por último, hicieron un llamamiento al ELN y a todos los grupos armados a poner fin «a esta práctica que va en contravía del horizonte de paz que tanto anhela la sociedad colombiana».
El ELN anunció el lunes que daba «por terminada» la suspensión de los secuestros con fines económicos, al considerar que el Ejecutivo ha incumplido con la creación de un «fondo multidonante para el proceso de paz». Esta suspensión se había acordado en diciembre de 2023, durante el quinto ciclo de las negociaciones, que se llevaba a cabo en Ciudad de México.
La delegación del Gobierno respondió en otro comunicado que en los diálogos de paz «siempre ha dejado en claro al ELN que el comercio con seres humanos no tiene ninguna clase de justificación y su eliminación no es objeto de ninguna transacción por parte del Estado colombiano».
¿Próxima cita?
Estaba previsto que las delegaciones del Gobierno y el ELN se reunieran en Caracas entre el 20 y el 25 de mayo para firmar un nuevo acuerdo en el marco de la negociación de paz, que retomaron en noviembre de 2022, pero no se sabe qué pasará tras la decisión del ELN de reanudar los secuestros.
La delegación de la Iglesia en esta labor de acompañamiento está liderada por Héctor Fabio Henao Gaviria, delegado de la Conferencia Episcopal Colombiana para las relaciones Iglesia-Estado y director del Secretariado Nacional de Pastoral Social. En marzo del año pasado, Henao manifestaba a Alfa y Omega su optimismo por el «buen camino» de las conversaciones, «aunque todavía estamos en una fase muy inicial».
Había terminado la segunda ronda de contactos (desde entonces se han producido tres más) y se acababa de trazar una hoja de ruta de seis puntos. Entre sus principales temas se encontraba «el fin del conflicto armado, en las víctimas y en las transformaciones democráticas de la sociedad para la construcción de la paz definitiva».