La diócesis más importante de China, sin obispo - Alfa y Omega

La diócesis más importante de China, sin obispo

Redacción

La muerte, a los 97 años, de monseñor Jin Luxian, obliga a las nuevas autoridades chinas a clarificar su relación con la Santa Sede. Jin, según el régimen, era obispo titular de Shanghái, la diócesis más importante de China, aunque Roma sólo le reconocía como auxiliar de monseñor Fan, muy anciano y enfermo. El Vaticano pidió a ambos nombrar a un sucesor, y así fue ordenado, en 2005, monseñor Joseph Xing Wenzhi, con el visto bueno del Gobierno, pero despareció en extrañas circunstancias y, al parecer, dimitió en 2010. En julio de 2012, fue nombrado coadjutor –también con el beneplácito de Pekín– monseñor Thaddeus Ma Daqin. El obispo desapareció al día siguiente, después de haber declarado, en la ceremonia de su ordenación, que rompía con la Asociación Patriótica, controlada por el régimen. Monseñor Ma sigue retenido por las autoridades comunistas, que no le permitieron presidir el funeral por monseñor Jin. Sobre el obispo fallecido, la Secretaría de Estado vaticana publicó, el martes, un comunicado que le califica de «personalidad clave en la historia de la Iglesia católica en China en los últimos 50 años». Como sacerdote jesuita, pasó 27 años entre prisiones y campos de reeducación. En 1982, sin embargo, aceptó ser ordenado obispo ilegítimamente por el régimen, aunque en 2004 se reconcilió con el Papa, que le reconoció no como obispo titular de Shanghái, sino auxiliar. La Secretaría de Estado vaticana destaca que, «bajo su guía, la diócesis de Shanghai ha tenido un gran desarrollo», y valora su «imponente empeño pastoral» y su labor en «la preparación de los nuevos sacerdotes y religiosas».