Comparaciones, metáforas, saltos de imagen, lugar y personaje…, un ritmo delicioso. Un cuento, Doctor Krupov, escrito por alguien que sabe narrar y contar. Un destello y ya está la secuencia enmarcada.
Las situaciones se evocan, cogen al lector por los ojos y le colocan ante la acción. ¡Cómo me cuesta no contar de qué trata!
El dolor que hay en el vaciamiento de la persona es el verdadero protagonista, el dolor que vive un hombre paciente que, a partir de ciertos indicios, decide buscar y rebuscar entre la miseria de una sociedad empequeñecida y cobarde. Parece mentira que sea cierto eso de que las cosas apenas cambian, que no hay nada nuevo bajo el sol.
Y es igual de interesante el segundo cuento, La urraca ladrona, sobre todo si el lector se puede acompañar de la obertura de la ópera homónima de Rossini para leerlo. No es una pedantería.
Alexandr Herzen
Ardicia
2014
106
14,15 €