La Colecta para Tierra Santa aspira a que los niños jueguen «sin miedo a la mueca satánica de la muerte»
Claudio Gugerotti, prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales, llama a participar en esta tradicional campaña que se convoca cada Viernes Santo
La Iglesia, «ante el grito de cuantos sufren gravemente», tiene el deber de «correr a ayudar lo antes posible a que renazca la vida». Con estas palabras, el cardenal Claudio Gugerotti, prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales, invita en una carta difundida este lunes por la prensa vaticana a participar en la tradicional Colecta para Tierra Santa que se convoca para el Viernes Santo de cada año.
Según el purpurado italiano, «todos, empezando por los niños, tienen derecho a vivir en paz y a tener de nuevo un hogar y una escuela». También a «jugar juntos sin miedo a volver a ver la mueca satánica de la muerte». Por lo que pide «el generoso regalo» de los fieles de todo el mundo que ayudan a sostener económicamente a las comunidades cristianas locales y a los Frailes Menores de la Custodia de Tierra Santa que «desde el tiempo de Jesús» salvaguardan los Santos Lugares.
Gugerotti recuerda «el llanto», «la desesperación» y «la destrucción» que se han producido en Tierra Santa en estos últimos años de conflicto. Y aunque celebra que «nuestros corazones están elevados por la tregua en vigor», también reconoce que «es frágil y, por su propia naturaleza, no será suficiente por sí sola para resolver los problemas y extinguir el odio en esa zona».
De acuerdo con el prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales, «tras la pandemia» y el último estallido de violencia entre el Estado de Israel y las milicias yihadistas de Hamás, se ha producido «la interrupción casi total de las peregrinaciones». Motivo por el que muchos cristianos se han visto obligados a exiliarse, pues «los ingresos económicos que provenían de la propia región se han reducido al mínimo». En un contexto tan agitado, apunta el italiano, esta colecta se erige como «un recurso esencial para la supervivencia de la preciosa presencia cristiana».
Además, a juicio de Gugerotti, «si queremos fortalecer Tierra Santa y asegurar un contacto vivo con los Santos Lugares, necesitamos apoyar a las comunidades cristianas que, en su variedad, ofrecen su alabanza perenne a Dios». Llama a «recordar las imágenes de muerte que han pasado constantemente ante vuestros ojos en estos tiempos de nuevo Calvario» y pide a los sacerdotes que hagan de esta colecta «una de sus prioridades pastorales».