La CEE reúne a las oficinas diocesanas contra los abusos para poner en común su trabajo
A la reunión, en la que compartieron «logros y dificultades», asistieron la práctica totalidad de diócesis
La Conferencia Episcopal Española (CEE) organizó este miércoles una primera jornada destinada a los responsables de las oficinas de protección de menores y contra los abusos de las diócesis españolas, un encuentro que ha servido para poner en común el trabajo realizado durante el último año, así como «los logros y dificultades». Según informó la propia CEE a través de su página web, participaron «la práctica totalidad» de oficinas.
Este servicio es una de las obligaciones que establece el motu proprio del Papa Francisco Vox estis lux mundi, que, además, señalaba que debían estar operativas el 1 de junio de 2020 como muy tarde, esto es, hace 16 meses.
Tanto la apertura como la clausura corrieron a cargo del secretario general y portavoz de la CEE, Luis Argüello. Entre medias, y tras la puesta en común, Jesús Rodríguez Torrente, auditor del Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España, intervino sobre la cuestión de la identidad de las oficinas de protección de menores, mientras que Carlos López Segovia, vicesecretario de Asuntos Económicos de la CEE, analizó los tipos de denuncia y las distintas posibilidades de actuar.
Por la tarde fue el turno para Salomé Adroher Biosca, profesora de la Universidad Pontificia Comillas y miembro de la Cátedra Santander de Derechos del Niño de la misma universidad, que ofreció una ponencia sobre el cuidado integral de menores y personas vulnerables.
Además de estas jornadas, la Conferencia Episcopal ha puesto a disposición de estos organismos diocesanos un servicio de asesoramiento, que apoyará «sus trabajos en las diversas áreas de actividad» y atenderá «sus peticiones o necesidades concretas». Aprobado en la Asamblea Plenaria del pasado mes de abril, también se ha ofrecido a las congregaciones.
Cifras de abusos
Precisamente, tras aquella reunión, Luis Argüello, informó en rueda de prensa de que la Santa Sede había investigado en los últimos 20 años a un total de 220 sacerdotes que ejercían su ministerio en nuestro país. De todos los casos, 151 fueron resueltos, mientras 69 permanecían abiertos.
El también obispo auxiliar de Valladolid explicó entonces que del total de sacerdotes, 140 pertenecían al ámbito diocesano, mientras que 76 formaban parte de congregaciones religiosas.
Asimismo, recordó, para poner en contexto las cifras, que durante todos estos años en España se realizaron un total de 220.000 denuncias –incluye todos los ámbitos– y que el número de sacerdotes que ha ejercido durante este tiempo asciende a 31.000.