José Ángel Mozo, nuevo capellán de Su Santidad: «Yo no quería este título»
El sacerdote dirige desde hace 44 años un centro ecuménico de referencia mundial. «Esto no cambia nada. Yo seguiré haciendo de cura, que esa es mi vocación», asegura
El sacerdote vallisoletano José Ángel Mozo ha recibido el título de capellán de su Santidad, un honor que le ha sido entregado por el obispo de la archidiócesis, Luis Argüello. La distinción fue promovida por el anterior arzobispo de Valladolid, el cardenal Ricardo Blázquez, en reconocimiento a la labor del presbítero en Lavinio-Anzio, donde dirige el centro ecuménico de Lavinio. Esta entidad es hoy un centro de referencia para fieles de todas las religiones del mundo. José Ángel Mozo fue también durante trece años consejero de la Embajada Española de la Santa Sede, responsabilidad que ahora ocupa otro sacerdote y periodista vallisoletano, Antonio Pelayo.
«Yo no quería esto. No tenía ninguna intención de que el Papa me concediera este título, y mucho menos comunicarlo», dice Mozo en entrevista con Alfa y Omega. «En cualquier caso, esto no cambia nada. Yo seguiré haciendo de cura, que esa es mi vocación. Todo lo demás, lo de la embajada y lo del centro ecuménico, solo lo he hecho por obediencia».
Una obediencia que le llevó hasta Roma a estudiar Teología. Una vez en Italia, Mozo ya no volvió. «El obispo de Albano me pidió que montara una Iglesia» en los años 70 «y aquí estoy desde entonces». El sacerdote levantó el templo «con mis propios bienes y los de un amigo italiano, que entonces no era sacerdote, aunque luego se ordenó, y estudiando mil modos de buscar dinero». A la vista está que los encontraron. «La verdad es que logramos hacer una Iglesia muy grande», reconoce.
No es el único proyecto que puso en marcha José Ángel Mozo. La parroquia estaba muy cerca de los cementerios inglés, americano y alemán de la II Guerra Mundial, «así que pensamos que esto podía ser un centro ecuménico para acoger a las personas de otras religiones que vinieran a visitar a sus familiares». El centro abrió sus puertas en 1979 y 44 años después sigue bajo la batuta de Mozo.
Entre las numerosas actividades destaca la acogida a los inmigrantes que vienen a trabajar en el mundo de la agricultura. «En su mayoría son indios y, la verdad, es que son ellos quienes han salvado los cultivos. Si no llegan a trabajarlos ellos, nadie lo hubiera hecho», asegura el nuevo capellán de Su Santidad. A todo este colectivo, desde la parroquia y el centro se les ayuda con alimentos. «Entregamos 190 bolsas de comida a la semana y a nadie le preguntamos de qué religión es».
Además de la labor caritativa, el centro ecuménico organiza coloquios y celebraciones conjuntas con los miembros de otras religiones. «Se trata de una zona multicultural. En el territorio de la parroquia tenemos dos templos Sij, un templo hindú, una mezquita musulmana y varias capillas de distintos grupos protestantes», detalla el sacerdote católico. Con todos ellos, «se realizan encuentros para crecer en conocimiento mutuo y amistad». Recientemente, por ejemplo, «montamos una peregrinación hasta Castelgandolfo y luego se realizó un diálogo en la plaza de la localidad en la que compartimos impresiones», concluye el presbítero.