Hombre de fe y de Iglesia, a la que amaba
Homenaje póstumo a monseñor Castán Lacoma en el centenario de su nacimiento
La diócesis de Sigüenza-Guadalajara y La Obra de la Iglesia unieron sus plegarias para conmemorar el centenario del nacimiento de su obispo, monseñor Laureano Castán Lacoma, en la tarde del 12 de noviembre pasado, en la iglesia parroquial de San Ginés de Guadalajara.
La Eucaristía fue presidida por el actual obispo de la diócesis, monseñor Atilano Rodríguez. El prelado destacó tres hitos significativos de la vida pastoral de monseñor Castán al frente de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara. Por un lado, su eficacia en la misión de preservar y potenciar la fe. Por otro, su celo apostólico y dedicación al impulso de la canonización de san Juan de Ávila, elevado a los altares por el Papa Pablo VI en 1970, y su posterior nombramiento como Doctor de la Iglesia por Benedicto XVI, en octubre de 2012. Dos causas en las que el prelado fue figura clave. Don Atilano subrayó también la preocupación de monseñor Castán por impulsar el espíritu sacerdotal y promover la vocación de los seglares. Pastor culto, solícito y celoso, consiguió crear un presbiterio bien formado. Creó el Consejo Pastoral y fundó la Comisión diocesana de Apostolado Seglar.
Ángel de Isidro