Francisco revela que ha firmado su renuncia en caso de impedimento médico
En una entrevista al diario ABC asegura que en dos años habrá una mujer jefa de Dicasterio y considera a Benedicto XVI «un santo»
El Papa revela en esta entrevista que ya en 2013 firmó un documento en el que renunciaba como Pontífice en el caso de un impedimento por cuestiones médicas. Asegura que se lo entregó al cardenal Tarcisio Bertone, entonces Secretario de Estado vaticano. Pablo VI y Pío XII también firmaron unas declaraciones similares. Es la primera vez que Francisco cuenta que existe ese documento y que esa cuestión estaría resuelta en caso de que se dieran las circunstancias. Sin embargo, una cuestión que no estaría resuelta sería la del estatuto del Papa emérito. Al ser preguntado si va a dejarse bien definido un estatuto de Pontífice emérito, responde: «No. No lo toqué para nada, ni me vino la idea de hacerlo. Será que el Espíritu Santo no tiene interés en que me ocupe de esas cosas».
Y a propósito del Papa Emérito, Benedicto XVI, Francisco asegura que lo visita con frecuencia y que sale «siempre edificado de su mirada transparente»: «Tiene buen humor, está lúcido, muy vivo, habla bajito, pero te sigue la conversación. Me admira su inteligencia. Es un grande. Es un santo. Es un hombre de alta vida espiritual».
Mujeres en puestos de responsabilidad
En esta extensa conversación, el Santo Padre aborda diversos temas como la presencia de la mujer en altos cargos vaticanos. Anuncia que tiene pensado un puesto para una mujer al frente de un Dicasterio en un plazo de unos dos años, cuando quedará vacante la jefatura de dicho ministerio vaticano.
Abusos en la Iglesia
También en la entrevista se toca el tema de los abusos. Francisco reitera su firme postura frente a este mal «muy doloroso» que afecta a la vida de muchas personas. Y repite algunas ideas que están guiando su actuación contra los abusos: «Son personas destruidas por quien tenía que haberlas ayudado a madurar y a crecer. Eso es muy duro. Aunque hubiera un solo caso, es monstruoso que la persona que te tiene que llevar a Dios te destruya en el camino». El Papa asegura que es positivo escandalizarse por cada uno de los casos que se conocen e incluso que se tambaleen los cimientos de la fe por estos escándalos porque «eso te lleva a actuar para evitarlo, a poner tu aporte. No me asusta. Si la fe se tambalea es porque está viva. Si no, no sentirías nada».
Francisco da un simple consejo a quien le suceda como Papa: «Les diría que no hagan los errores que yo hice, punto y nada más». Y reconoce que ha habido muchos errores en estos casi 10 años de pontificado, aunque no especifica cuáles.
España, Cataluña, Latinoamérica
También comenta a preguntas de ABC algunas cuestiones de actualidad de España como el separatismo catalán o la relación con Latinoamérica. Francisco lamenta que ahora «se desempolve» el discurso de las dos Españas y asegura que «cada país tiene que buscar su camino histórico para resolver estos problemas». En cualquier caso, indica claramente que en Cataluña «lo que no puede la Iglesia es hacer propaganda por un lado o por otro sino acompañar al pueblo para que encuentre una solución definitiva». Sentencia que si un cura quiere hacer política, que deje de ser cura y se meta en política.
Además, habla sobre el descubrimiento de América: «La hermenéutica, para interpretar un hecho histórico, tiene que ser la de su época, no la actual. Evidentemente que ahí se mató gente, evidentemente que hubo explotación, pero también los indios se mataron entre ellos. El ambiente de guerra no lo exportaron los españoles. Y la conquista fue de todos. Yo distingo colonización de conquista. A mí no me gusta decir que España conquistó. Discutible, todo lo que vos quieras, pero colonizó. Si uno lee las directivas de los reyes españoles de la época sobre cómo debían actuar sus representantes, ningún rey de ningún otro país hizo tanto. España se metió en el territorio. España entró en el territorio, otros países imperiales se quedaron en la costa. España no pirateó. Eso hay que tenerlo en cuenta. Y detrás de esto hay una mística. España sigue siendo la Madre Patria, algo que no todos los países pueden decir».
Ucrania
Preguntado por la guerra de Ucrania, el Santo Padre asegura que no ve un final «a corto plazo porque es una guerra mundial» en la que hay distintos intereses en juego. Y lamenta: «Y cuando hay armas para usar, vender y probar. Hay muchos intereses». Francisco desea la paz como regalo de Navidad «un poco de paz» para esta martirizada tierra, pero también se ha acordado de otras todavía flageladas por la violencia y que han caído en el olvido general como Siria, Yemen o Myanmar.