Francisco: «Nunca he tapado la agresión de Rusia a Ucrania» - Alfa y Omega

Francisco: «Nunca he tapado la agresión de Rusia a Ucrania»

El Papa habla para America Magazine sobre aborto, polarización en la Iglesia, ordenación de mujeres, Ucrania y China. «Yo he optado por la vía del diálogo», afirma

Redacción
Un momento de la entrevista al Papa. Foto: America Media / Antonello Nusca.

«La polarización no es católica. Un católico no puede reducirlo todo a polarización. Lo católico une lo bueno y lo no tan bueno. Lo católico siempre es armónico de las diferencias», ha afirmado el Papa Francisco a America Magazine, de la Compañía de Jesús en Estados Unidos. Para el Papa, «el Espíritu Santo en la Iglesia no reduce todo a un solo valor, sino que hace armonía de las diferencias de los opuestos. Y ése es el espíritu católico».

En la entrevista a la revista norteamericana, el Papa ha afrontado diversos asuntos de actualidad que afectan a la Iglesia en aquel país, señalando que «a veces se corre el riesgo de disminuir la autoridad del obispo» cuando se mira demasiado la actividad de una Conferencia Episcopal. Así, la Conferencia Episcopal «está para unir a los obispos, trabajar juntos, discutir los temas, hacer planes de pastoral, pero cada obispo es el pastor» de su diócesis. El «secreto» para el Papa es considerar que «hay algunos buenos obispos que son más de derechas, y algunos buenos obispos que son más de izquierdas, pero son más obispos que la ideología, son más pastores que la ideología».

Al ser preguntado sobre si los obispos deben darle prioridad al aborto en relación a otras cuestiones de justicia social, Francisco ha señalado que «en cualquier libro de embriología se dice que un poco antes del mes de la concepción es un ser humano vivo. El problema es cuando esta realidad de matar a un ser humano se transforma en un problema político, o cuando un pastor de la iglesia entra en una categorización política».

Por eso, «no dejemos que nadie se apropie de esa verdad que es universal. No es de tal partido o de tal otro. Es universal. Sea en este problema del aborto como en otros problemas, no hay que perder de vista la pastoralidad», ha pedido el Santo Padre.

Una homilía compartida con víctimas

Francisco se ha referido también a la cuestión de los abusos sexuales a menores para recordar que «el 42 o 46 % de los abusos suceden en la familia o en el barrio. Después, en el mundo del deporte y en el de la educación, y el 3 % los sacerdotes católicos. Uno podría decir “qué bien, son pocos”, pero no: si fuera uno solo, es monstruoso».

También ha reconocido que «hasta el momento de la crisis de Boston en la Iglesia se actuaba cambiando a algún abusador de lugar», y que a partir de entonces «la Iglesia hizo una opción: no cubrir; y de ahí se fue progresando a través de los procesos judiciales, y de la creación de la Pontificia Comisión para la Tutela de Menores. El grande en tomar estas decisiones fue Benedicto XVI».

En relación a este asunto, Francisco ha desvelado que con ocasión de su viaje a Irlanda en el año 2018, se encontró con varias víctimas de abusos y que «al principio estaban un poco enojados. Entonces yo les dije: “Miren, hagamos una cosa, mañana tengo que decir el sermón. ¿Por qué no lo preparamos juntos, sobre este problema?”. Y entonces ahí se dio un fenómeno lindo porque lo que era simplemente la protesta se transformó en algo positivo y todos juntos hicieron la homilía conmigo del día siguiente».

Con el equipo de redacción de America Magazine. Foto: America Media / Antonello Nusca.

Según Francisco, la cuestión de la ordenación de mujeres en la Iglesia —otro de los asuntos sobre el que le preguntó el equipo de America Magazine— «es un problema teológico», porque «el camino no es sólo la ministerialidad. Hay otro principio que es más importante todavía, el de la femineidad en la Iglesia. La Iglesia es más que un ministerio».

El Papa contempla asimismo «el camino administrativo», en el que «creo que hay que dar más lugar a la mujer. Acá, en el Vaticano, los lugares donde hemos puesto mujeres está funcionando mejor».

«Un gesto inusual»

El Papa ha sido criticado por su aparente voluntad de no criticar directamente a Rusia por su agresión a Ucrania, ante lo que Francisco responde que «si Ucrania es un pueblo mártir, es porque hay alguien que lo martiriza. Ciertamente quien invade es el Estado ruso, eso es muy claro. A veces trato de no especificar para no ofender y más bien condenar en general, aunque se sabe bien a quién estoy condenando. No es necesario que ponga el nombre y el apellido».

En esta línea, el Pontífice ha recordado que el segundo día de la guerra fue a la embajada rusa, «un gesto inusual porque un Papa nunca va a una embajada», donde «le dije al embajador que le dijera a Putin que yo estaba dispuesto a viajar para negociar». También ha recordado que con el presidente Zelensky habló por teléfono tres veces, y que en estos meses varios cardenales han viajado a Ucrania. «Mi trabajo en general es recibir listas de presos, sean civiles o militares, y hacerlas llegar al gobierno ruso. Y la respuesta fue siempre muy positiva. Nunca di la impresión de estar tapando la agresión», ha dicho el Papa.

A Francisco también se le ha acusado de ser socialista, comunista, marxista…, pero «yo trato de seguir el Evangelio. A mí me iluminan mucho las bienaventuranzas, pero sobre todo el protocolo con el cual vamos a ser juzgados: Mateo 25. “Tuve sed y me diste de beber, estuve preso y me visitasteis, estuve enfermo y me cuidaste”. ¿Jesús es comunista entonces?», se ha preguntado Francisco, para quien el problema de fondo «es el reduccionismo sociopolítico del mensaje evangélico».

Por último, Francisco también ha querido responder a las críticas sobre el acuerdo vaticano con China, ante lo que ha declarado que para él «la realidad es dialogar o no dialogar. Y uno dialoga hasta el punto que se puede. Con China yo he optado por la vía del diálogo. Es lento, tiene sus fracasos, tiene sus éxitos, pero no encuentro otra vía. Hay cristianos ahí, hay que cuidarlos, que sean buenos chinos y buenos cristianos. El diálogo siempre abre puertas, siempre».

Diez años de un Papa «feliz porque Dios me hace feliz»

Haciendo blanza de sus diez años de pontificado, el Papa ha reconocido ante el equipo de America Magazine que «hice lo que el Espíritu Santo me iba diciendo que tenía que hacer. Y cuando no lo hice, me equivoqué».

Como Papa, lo que más le ha costado ha sido «no andar por la calle, con la gente, porque acá no se puede salir, es imposible andar por la calle». Sin embargo, «estoy feliz porque me siento feliz, Dios me hace feliz —dice Francisco—. Tengo esa seguridad de que yo no no camino solo, Él está a mi lado. Uno tiene sus equivocaciones, también sus pecados, yo me confieso cada 15 días, pero no sé, yo soy así».