Francisco pide celebrar el día de nuestro bautismo «como un nuevo cumpleaños» 

En el rezo mariano de este domingo, fiesta en la que la Iglesia universal celebra el bautismo de Jesús en el río Jordán, el Papa Francisco se ha dirigido a los fieles congregados en la plaza de San Pedro para recordarles que, con esta solemnidad, se cierra la Navidad. Además, el Santo Padre ha tenido unas palabras de recuerdo para los habitantes de Los Ángeles por los terribles incendios que han asolado parte de la ciudad y sus alrededores, dejando una decena de víctimas mortales y cientos de miles de desplazados. «Estoy cerca y rezo por todos ellos», ha asegurado el Pontífice, quien además ha enviado este sábado un telegrama al arzobispo de la ciudad californiana para mostrar su cercanía.  

Durante la catequesis, Francisco ha recalcado las dos características principales y humanas «que Dios hace propias» con el bautismo: el rostro y la voz. La primera es esencial para «descubrirnos también nosotros hijos del Padre y reconocer su presencia en los hermanos». La segunda, que nos recuerda que siempre y en todo momento «estamos acompañados por la voz del Padre que dice a cada uno: “Tú eres mi Hijo muy querido”».   

El Santo Padre ha querido también poner deberes: averiguar y recordar el día de nuestro bautismo. «Preguntémonos: ¿qué día he sido bautizado?», ha reflexionado desde el balcón central del Vaticano. «Si no lo recordamos, cuando lleguemos a casa preguntémosle a nuestros padres y padrinos la fecha de nuestro bautismo y celebrémosla como un nuevo cumpleaños, porque es el nacimiento en el espíritu de Dios». Asimismo, ha asegurado que esa fecha «es un día importante para grabar en nuestro corazón». «No lo olviden, es una tarea que tienen que hacer en casa: la fecha de mi bautismo».  

21 niños bautizados en la Capilla Sixtina  

Como es tradición en la fiesta del bautismo del Señor, el Papa Francisco ha presidido este domingo una Eucaristía en la conocida Capilla Sixtina en la que han sido bautizados 21 bebés; 13 niños y 8 niñas, hijos de los trabajadores del Vaticano. Durante la breve homilía, el Santo Padre ha pedido «que crezcan en la fe y en la alegría de la familia» y ha recordado que el bautismo que hoy han recibido es «el regalo más grande» que le pueden haber hecho los padres.  

Durante toda la ceremonia, el Papa se ha mostrado muy cercano a los pequeños, invitando a los padres al inicio de la celebración a no tener miedo a darles de comer o atender a sus necesidades si hiciera falta. «Que se sientan a gusto. Hoy son ellos los que mandan y debemos servirles con el Sacramento, con las oraciones», ha afirmado Francisco.