Francisco destaca el «amor» y la «sabiduría» con la que Benedicto XVI sirvió a la Iglesia
El Papa ha pedido un aplauso para su antecesor durante el rezo del ángelus y ha recordado que «la familia es la célula básica de la sociedad»
Cuando se cumple un año de la muerte de Joseph Ratzinger, el Papa Francisco se ha acordado de su antecesor tras el rezo el ángelus en la plaza de San Pedro y ha pedido «un aplauso para Benedicto XVI». La ovación ha venido acompañada por una breve alocución del Santo Padre, que ha destacado el «amor» y la «sabiduría» con la que el Pontífice alemán sirvió a la Iglesia. «Sentimos mucho cariño, gratitud y admiración por él», ha añadido Bergoglio, al mismo tiempo que ha asegurado que el oso de Dios —como se definió él mismo— «nos bendice y acompaña desde el cielo».
Tras la oración mariana, Francisco también se ha querido acordar de la trágica celebración de Navidad en Nigeria, que ha estado marcada «por graves actos de violencia en el estado de Plateau». Allí fueron asesinados 170 cristianos en un ataque coordinado por terroristas de la etnia fulani. «Estoy orando por ellos y sus familias. ¡Que Dios libre a Nigeria de estas atrocidades!», ha pedido el Papa.
Asimismo, el Santo Padre ha vuelto a acordarse de todos aquellos lugares azotados por la guerra: Ucrania, el pueblo de Palestina e Israel, Sudán y tantos otros. Ante esta Tercera Guerra Mundial a cachitos, como él mismo suele describir, «tengamos el coraje de preguntarnos: ¿Cuántas vidas humanas han sido destrozadas por los conflictos armados? ¿Cuantos muertos? ¿Y cuánta destrucción, sufrimiento, pobreza? Que quienes tienen intereses en estos conflictos escuchen la voz de su conciencia», ha clamado el Pontífice.
Por último, ha instado a no olvidar «a los sufrientes rohinyá» y ha asegurado su oración «por todos aquellos que perdieron la vida en la explosión del camión cisterna en Liberia». Y antes de dar por terminada la celebración del ángelus, el Papa ha recordado que «la familia es la célula básica de la sociedad» y «¡siempre necesita ser defendida y sostenida, siempre!». Este domingo la Iglesia celebra la fiesta de la Sagrada Familia.
Superar obstáculos
Sobre María, José y Jesús, el Pontífice ha advertido que lejos de disfrutar de una vida cómoda, al «tener a Dios presente en carne y sangre entre ellos», se ven abocados a una vida pobre. «¡En lugar de tener las cosas fáciles, parece que esta familia encuentra obstáculos! ¡En lugar de estar libre de dificultades, esta familia está inmersa en tremendos dolores!».
Sin embargo, esta supuesta contradicción revela «algo muy hermoso». Según Francisco, «Dios, a quien muchas veces imaginamos que está más allá de los problemas, vino a vivir nuestra vida con sus problemas». De esta forma, manda un mensaje muy claro: «Si estáis en dificultades, sé lo que estáis viviendo. Lo experimenté. Yo, mi madre y mi padre lo hemos vivido para poder decirle también a tu familia: ¡No estás solo!».
Para terminar, Bergoglio ha recomendado a las familias «poder maravillarse», pues «es un secreto para avanzar bien en familia. No acostumbrarse a lo cotidiano de las cosas; sabiendo, en cambio, maravillarnos ante Dios que nos acompaña».