España dice alto y claro «sí a la vida»
Unas 20.000 personas, según la organización, han marchado por el centro de Madrid para reivindicar el derecho a la vida desde su concepción hasta la muerte natural
Tras dos años de parón por la pandemia, las calles de la capital han vuelto a vestirse de fiesta y de reivindicación para pedir el respeto por la vida humana en todas las etapas de su existencia. La Plataforma Sí a la Vida, en la que se integran más de 500 organizaciones, ha organizado esta marcha que ha teñido de verde las principales arterias de la capital. En la madrileña plaza de Cibeles se ha habilitado un escenario desde el que ha tenido lugar la clausura de la manifestación que ha congregado, según los organizadores, a más de 20.000 personas llegadas de distintos puntos de España. Delegación de Gobierno rebaja esta cifra a 9.000 asistentes.
Muchos de los participantes en el evento han sido jóvenes que han dejado claro su «sí a la vida» y su rechazo a la cultura y las leyes que promueven el aborto o la eutanasia. Una vez en el escenario, la influencer Grace Villarreal, madre de familia numerosa, y Diego de Julián han conducido el evento en el que se han escuchado distintos testimonios que han resaltado el valor de la vida humana.
Uno de ellos ha sido el del presidente del Colegio de Médicos de Madrid, Manuel Martínez-Sellés, quien ha recordado que «la medicina defiende la vida» y que tanto el código deontológico de los médicos españoles como la Asociación Médica Mundial «prohíben de forma muy clara la eutanasia, aún con petición expresa del paciente». También ha denunciado los ataques a la libertad de los médicos y, por ello, ha insistido en que todos los médicos tienen «el derecho a la objeción de conciencia».
Una familia que acoge a pequeños con enfermedades también ha compartido su experiencia, así dos hermanas ucranianas. Jalina, desde hace tiempo en España ha exclamado: «Como Ucrania lucha por Europa luchemos, por favor, por todos los bebés por nacer». Después, y en directo, ha sido posible escuchar los latidos del corazón del bebé en el vientre de su hermana, un momento muy emotivo que ha dado paso al tradicional minuto de silencio por todos los no nacidos a causa del aborto y todas las víctimas de la eutanasia. A continuación, se han soltado cientos de globos que han pintado de verde el cielo de Madrid.
El manifiesto de la convocatoria recuerda, entre otras cosas, «que todo ser humano tiene derecho a la vida y a ser tratado como merece su especial dignidad, desde su concepción hasta la muerte natural; rechaza todas las leyes y prácticas que atentan contra la vida humana en cualquier momento de su existencia, así como su financiación e imposición ideológica; reclama que, de manera prioritaria, los avances médicos y los cuidados lleguen a todos sin excepción y se destinen a ello todos los recursos materiales y personales necesarios; y da las gracias a todas las personas y asociaciones que desde distintos ámbitos trabajan a favor de toda vida humana, a pesar de las muchas dificultades e incluso de la persecución».