Juramento del cargo de dos ministros. Seriedad, compostura, fotos cara a la galería, sonrisas… Pero tras el objetivo de la cámara, los señores ministros se comportan tal y como son. El tesorero es una triste sátira sobre lo que verdaderamente puede ser un día a día en la vida de tanto político corrupto.
La pieza está centrada en la figura del Ministro de Cultura, que quiere resucitar un mastodóntico proyecto de construcción del Museo de la democracia, para enriquecerse él y su familia. Contabilidad en B, sobornos, favores, sobres, Suiza, dinero negro, saqueo de cajas de ahorros, recalificaciones, enchufes para la familia… Todo un desfile de despropósitos. Además, otros cuatro personajes: un Ministro de Agricultura resabiado tras haber sido cinco veces Ministro; un inseguro Ministro de Hacienda poco valorado y temeroso; un todopoderoso y místico Ministro de Economía; y finalmente, El tesorero, recrean este pedazo de la realidad de España.
El creador del texto es el genial José Ignacio Tofé. Usando sus propias palabras: «Mi vida cambió para siempre cuando a los dieciséis años me apunte al grupo de teatro. ¿O fue cuando vi Tucker: the man and his dream? Probablemente, el punto sin retorno fue cuando comencé a escribir y dirigir cortos. El caso es que no he encontrado otra actividad que me dé tantas alegrías y tantos sinsabores como idear y contar historias. Después de actuar, hacer monólogos cómicos, escribir, dirigir teatro y cortos, sé que lo que hago mejor es escribir». Autor de numerosos guiones para cortos, monólogos y obras de teatro, Tofé esta viviendo un momento de gloria pues, en la corta vida del texto, ya se ha representado en numerosas ocasiones.
Esta vez, una nueva revisión de su libreto llega al Off del Lara de la mano de dos increíbles actores, José Luis Alcobendas y Juan Carlos Vellido, que realizan un trabajo de creación de personajes verdaderamente impecable.
La posibilidad de ver tan de cerca al actor te hace sentir con más visceralidad su trabajo. Respiras como él respira, sientes como él siente, te ríes como él se ríe. Y es que no hay que olvidar que, a pesar de la triste realidad en la que está basada la obra, estamos ante una comedia muy divertida, muy bien dirigida y muy bien interpretada. Sin duda, una elección estupenda para pasar un buen rato. Una nueva vuelta de tuerca a la realidad, pero en clave de humor. Efectivamente, la risa nos salva.
★★★☆☆
Teatro Lara
Corredera Baja de San Pablo, 15
Callao, Tribunal
OBRA FINALIZADA