El Sínodo en Madrid «se construye con los pequeños síes de cada día» - Alfa y Omega

El Sínodo en Madrid «se construye con los pequeños síes de cada día»

El viernes tuvo lugar un encuentro diocesano en el Seminario Conciliar, con la participación del cardenal Cobo, para seguir avanzando y concretando la implementación del Sínodo en Madrid

Santiago Tedeschi Prades
Encuentro diocesano en el Seminario Conciliar de Madrid
Encuentro diocesano en el Seminario Conciliar de Madrid. Foto: Archimadrid / Santiago Tedeschi.

El salón de actos del Seminario Conciliar se llenó este viernes para acoger el encuentro diocesano de cara a seguir avanzando en la implementación del Sínodo en Madrid. La jornada contó con la presencia de Eva Fernández, presidenta de Acción Católica General e invitada especial del Papa en la Asamblea Sinodal, quien dialogó con el arzobispo sobre la experiencia vivida en el Sínodo en Roma y los desafíos que se presentan para la Iglesia universal y para la diócesis de Madrid.

Al principio del encuentro, el cardenal José Cobo animó a la comunidad diocesana a continuar el camino sinodal con apertura y compromiso. «La Iglesia y el Sínodo se construye con los pequeños síes de cada día y que, a lo largo de la historia, y con muchas tareas, habéis ido dando. Algunos han tenido frutos, otras nos han frustrado o dado alegría, pero hoy damos gracias al Señor porque Él ha estado en cada uno de los rincones de nuestra ciudad», remarcó el arzobispo.

«Que sea la voz de Dios»

En su intervención, Cobo pidió «luz suficiente para caminar juntos y que sea la voz de Dios la que se escuche en nuestra Iglesia diocesana». El arzobispo recordó que la sinodalidad es un camino que nació con la invitación del Papa Francisco a reflexionar sobre «el caminar juntos en la Iglesia». A lo largo del proceso, se ha evidenciado que «son las relaciones las que sostienen la vitalidad animando sus estructuras». En esta línea, resaltó también la importancia de la «conversación en el Espíritu» como un método adecuado para el trabajo sinodal, y abogó por fomentar espacios en los que los consejos pastorales y parroquiales puedan proponer puntos para el orden del día.

Asimismo, el arzobispo insistió en que «una parroquia no puede estar centrada en sí misma, sino orientada a la misión». Y señaló que «institutos, congregaciones, movimientos y asociaciones están llamados a actuar en sinergia con la Iglesia local». En este sentido, destacó la importancia de la piedad popular, la catequesis y la formación de discípulos para renovar la mentalidad y transformar los espacios formativos. Por último, hizo un llamamiento a la transparencia, la rendición de cuentas y la evaluación en la Iglesia, subrayando que «esto no es un empeño burocrático, sino un compromiso con la misión y con los fieles».

Eva Fernández, presidenta de Acción Católica General e invitada especial del Papa en la Asamblea Sinodal durante su intervención
Eva Fernández, presidenta de Acción Católica General e invitada especial del Papa en la Asamblea Sinodal durante su intervención. Foto: Cáritas Madrid.

Las palabras de Eva Fernández, presidenta de Acción Católica General

Por su parte, la presidenta de Acción Católica General e invitada especial del Papa en la Asamblea Sinodal en Roma, compartió su experiencia y las claves para vivir la sinodalidad. Recordó cómo la llamada para participar en el Sínodo es algo que nunca olvidará y subrayó la importancia de caminar juntos y de fomentar una «conversión de nuestras relaciones y estructuras». «Ojalá fuéramos capaces de apreciar las diferencias como un don», invitando a superar prejuicios y promover la corresponsabilidad.

La presencia de la Iglesia en el mundo digital, la importancia de cuidar los contenidos que se comparten en las redes sociales, la confianza en los jóvenes y fomentar su creatividad han sido varios de los temas abordados por la presidenta de Acción Católica General. El encuentro ha sido un paso más en el compromiso de la archidiócesis de Madrid con el proceso sinodal impulsado por el Papa Francisco, animando a todos los fieles a vivir la sinodalidad en la práctica y ha servido para seguir consolidando los frutos del camino sinodal en Madrid.