El Santo Padre considera el multilingüismo una herramienta «para la comprensión mutua»
Con motivo de la Jornada Internacional de la Alfabetización, ha reivindicado la capacidad de hablar varios idiomas para estrechar lazos entre diferentes pueblos
El Papa Francisco ha elogiado el valor de hablar varias lenguas durante la Jornada Internacional de la Alfabetización 2024. Se celebra este lunes en Yaundé, Camerún. A través de una carta firmada por el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, el Pontífice ha definido el multilingüismo como un «cada vez más reconocido factor que favorece el desarrollo personal». Y que, además, fomenta «la flexibilidad mental, la apertura y la adaptación a otras realidades culturales».
Esta Jornada Internacional de la Alfabetización se celebra desde 1967 y es, a juicio del Santo Padre, una «ocasión particularmente propicia para hacer un balance de los resultados alcanzados en la lucha contra el analfabetismo». También para animar y respaldar a las personas e instituciones dedicadas a la educación.
Este año, la cita tiene como lema Promover la educación multilingüe: la alfabetización para la comprensión mutua y la paz. En opinión del Papa, esta capacidad para hablar varios idiomas sirve para la «promoción de la comprensión mutua» entre diferentes naciones. En la carta de Parolin en nombre de Francisco, el secretario de Estado cita asimismo a Nelson Mendale, quien decía: «Si hablas a un hombre en un idioma que entiende, hablas a su cabeza; si le hablas en su idioma, hablas a su corazón». De acuerdo con el purpurado italiano, esta cita del mandatario sudafricano recalca que «la lengua es un instrumento fundamental en la comunicación entre las personas y los pueblos».
Finalmente, el Papa Francisco, en línea con el mensaje que Juan Pablo II escribió para el mismo evento en 1986, anima «encarecidamente a los responsables políticos, los educadores y el público en general a valorar la importancia de la alfabetización para construir una sociedad más instruida, fraterna, solidaria y pacífica». Y se despide enviando «abundantes gracias y bendiciones divinas» a todos los involucrados en la promoción de la alfabetización y el diálogo intercultural.