El Papa recibe a la niña herida por la mafia: «Dios seguirá siempre sus pasos»
Noemi Staiano, asegura su madre, ha perdonado a los miembros de la camorra que casi acabaron con su vida hace dos años en Nápoles
«La mafia destruye la esperanza, pisotea los derechos, pero Dios seguirá siempre los pasos de vuestra maravillosa criatura. ¡Miremos hacia delante!». Son las palabras con las que el Papa infundió el lunes ánimos renovados a la familia de Noemi Staiano. Hace dos años, cuando solo tenía 4, la herida de bala que sufrió en la Plaza Nacional, de Nápoles, la llevó a debatirse entre la vida y la muerte. Se había visto atrapada en un tiroteo por un ajuste de cuentas entre dos clanes de la camorra.
«No nos sentimos afortunados, sino que hemos recibido un milagro», ha explicado su madre, Tania Esposito, a VaticanNews. En cuanto la pequeña estuvo fuera de peligro, los padres empezaron a intentar reunirse con el Papa Francisco. La pandemia primero, y el relevo al frente de la diócesis de Nápoles después, retrasaron este deseo. Pero en cuanto Domenico Battaglia, el nuevo obispo, los conoció, se comprometió a hacer todo lo posible para hacerlo realidad.
Y así fue por fin este lunes, en la Casa Santa Marta. Allí acudieron acompañados de don Mimmo, como se hace llamar; un pastor que en sus primeros meses ya ha protagonizado varios gestos de repulsa hacia la mafia. La hija más pequeña, de 3 años, se había quedado en casa. Los nervios eran evidentes, y también Noemi los sentía. Pero «no deja de ser una niña de 6 años. Se lo toma todo como un juego», ha explicado su madre.
«¿Quién es este tipo?». «Eres tú»
Uno de los momentos más emocionantes ha sido cuando «don Mimmo» le ha dicho: «¿Qué dices, le recitamos al Papa» las oraciones que has aprendido en el colegio? «Ha dicho el avemaría y la oración al ángel de la guarda. Él la ha cogido de la mano y han rezado juntos. Ha sido un momento muy emocionante».
También hubo anécdotas simpáticas, por ejemplo a costa del regalo que le han llevado al Santo Padre: una imagen que lo representa a él mismo saludando. «Al abrirlo ha dicho a Noemi sonriendo: “¿Quién es este tipo?”. “Eres tú”. Se han reído y han estado bromeando sobre ello». El encuentro ha terminado con otra oración compartida.
Con corsé hasta los 18
Tania ha reconocido que su hija aún «no se da cuenta de lo que ha significado todo esto para ella y para nuestra familia, seguramente con el tiempo lo entenderá». Aunque «lo peor ya pasó», aún tiene daños en la columna vertebral. Ha pasado ya por tres operaciones. Y «tendrá que someterse a otras de reconstrucción en la columna, por lo que seguramente hasta los 18 años» llevará corsé.
El matrimonio, reconoce ella, no ha perdonado a quienes desde dentro de la mafia han causado tanto daño a su hija. «No porque no queramos; al contrario, como familia cristiana estamos dispuestos. Sin embargo, ninguno ha pedido perdón jamás». Por el contrario, «Noemi creo que ciertamente ya les ha perdonado. Es una niña que nos puede enseñar a todos, incluso a sus padres, a amar».