El Papa pide una evaluación de la respuesta frente a los abusos en las Iglesias locales

«Hace casi un año que promulgué la constitución apostólica Praedicate Evangelium, en la que pedí a la Curia romana que prestara un servicio cada vez mayor a las Iglesias locales. El trabajo de establecer procedimientos claros para la protección de las personas vulnerables en la Iglesia debe convertirse en una prioridad en cada Iglesia local. He pedido a la Pontificia Comisión para la Protección de Menores que supervise la aplicación adecuada de Vos estis lux mundi, para que las personas víctimas de abusos tengan vías claras y accesibles para buscar justicia».

Con estas palabras, el Papa Francisco ha anunciado este martes, en un mensaje enviado al II Congreso Latinoamericano Atender, informar, comunicar: Claves para una gestión eficaz en los casos de abuso sexual que se celebra en Paraguay, que el Vaticano está trabajando en la supervisión y verificación «de las políticas y prácticas en toda la Iglesia» y que concluirá con un informe en el que se señalarán las mejoras necesarias.

El Pontífice ha asegurado que este drama y la mala gestión, según informa EFE, representan «un claro peligro» para la Iglesia. «El abuso sexual por parte del clero y su encubrimiento por parte de obispos y superiores religiosos ha dejado una herida indeleble en el cuerpo de Cristo, debido al daño causado a tantas personas», ha añadido.

Así, ha recalcado que quien disminuya el impacto de esta realidad y minimice el peligro actual «deshonra a aquellas personas que han sufrido tanto y engaña a los que dicen servir». También añade que no se puede permitir que la falta de recursos sirva de impedimento para promover medidas de protección adecuadas.

En cualquier caso, Francisco ha reconocido que los líderes de la Iglesia «han hecho mucho para afrontar este mal y evitar que se repita» y animó a organizar eventos como el congreso al que se ha dirigido, pues sirven «a la escucha, la reflexión y la ayuda». «Debemos ser capaces de ver los resultados de que los menores están más seguros en nuestra Iglesia», ha añadido.