El Papa pide a todas las realidades de la Iglesia que se impliquen contra la trata
En su mensaje por la X Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, solicita «escuchar a quien sufre» y volver a «soñar con un mundo en el que las personas puedan vivir con libertad»
El Papa Francisco ha exhortado este jueves a «actuar contra la trata y contra toda forma de explotación» con «acciones concretas». En un mensaje hecho público con motivo de la X Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, que se celebra el 8 de febrero coincidiendo con la memoria litúrgica de santa Josefina Bakhita, el Santo Padre invita a recordar «la injusticia que padeció, su sufrimiento, pero también su fortaleza y su camino de liberación y de renacimiento a una vida nueva».
Santa Josefina Bakhita fue una religiosa sudanesa que en su infancia, en el siglo XIX, fue vendida como esclava. «Nos anima a abrir los ojos y los oídos, para ver a los que permanecen invisibles y escuchar a los que no tienen voz; para reconocer la dignidad de cada uno y para actuar contra la trata y contra toda forma de explotación», emplaza Francisco.
Esta lucha exige «acciones concretas». Entre ellas, «rezar y actuar tanto personalmente como en las familias, en las comunidades parroquiales y religiosas, en las asociaciones y en los movimientos eclesiales, así como en los distintos ámbitos sociales y políticos».
Aunque «la trata es a menudo invisible», agradece que «los medios de comunicación, gracias también a reporteros valientes, arrojan luz sobre las esclavitudes de nuestro tiempo». Pese a todo, «la cultura de la indiferencia nos anestesia». Por lo que invita a los fieles a ayudarse «recíprocamente a reaccionar, a abrir nuestras vidas y nuestros corazones a tantas hermanas y tantos hermanos que son tratados como esclavos». «Nunca es demasiado tarde para decidirse a hacerlo».
Francisco considera «fundamental tener la capacidad de escuchar a quien sufre». Y pide pensar en «las víctimas de los conflictos y de las guerras, en cuantos han sufrido los efectos del cambio climático, en las multitudes de migrantes forzosos y en quienes son objeto de explotación sexual o laboral, de forma particular, las mujeres y las niñas». Además invita a dejarse «interpelar por sus historias» y volver a «soñar con un mundo en el que las personas puedan vivir con libertad y dignidad».