El Papa llama a la madre de Antoni Vadell: «Puede estar orgullosa de su hijo»

Llegan buenas noticias desde Barcelona. El obispo auxiliar Antoni Vadell, que se encontraba ingresado en el Hospital Clínic de Barcelona desde el 18 de diciembre, continuará el tratamiento para hacer frente al cáncer de páncreas que padece en su domicilio, una vez que su estado clínico ha evolucionado favorablemente.

«Ante la mejoría clínica de Antoni Vadell i Ferrer, dentro de su estado de salud, desde este lunes recibirá asistencia médica domiciliaria, acompañado de su familia», se puede leer en el comunicado del Arzobispado de Barcelona. En él se recuerda, además, que en estos momentos «no se permite el acceso de visitas por prescripción clínica y para evitar cualquier riesgo de contagio» por COVID-19.

Desde que el propio Vadell hiciera pública su enfermedad el pasado mes de julio, son muchos los que dentro y fuera de la diócesis catalana siguen con interés su evolución. También alguien muy especial, el Papa Francisco, que el día de Reyes llamó a la familia del obispo mallorquín. «Puede estar muy orgullosa de su hijo», le dijo a Antonia Ferrer, la madre, emocionada y sorprendida por semejante regalo.

Posteriormente, también llamó a Juan Vadell, hermano de Antoni, que es la persona que lo ha acompañado durante la convalecencia en el hospital ante la imposibilidad de recibir visitas por la situación de la pandemia.

La enfermedad ha impedido al obispo auxiliar acudir a la visita ad limina que esta semana realizan los obispos de la Provincia Eclesiástica de Barcelona y, por tanto, encontrarse con el Papa Francisco.