El intérprete: un volcán musical - Alfa y Omega

«Gracias al teatro resucito cada día». La frase, resume, en pocas palabras, la propuesta escénico-musical de Asier Etxeandia y su banda. Porque El intérprete es un viaje por las canciones de ayer. Aquellas que bailaban nuestros padres, las del más acá de los ochenta, y el puro rock de las últimas décadas.

Exteandia, que como se dice, «lo da todo» sobre el escenario, demuestra sobre las tablas del Teatro La Latina su buen hacer musical. Su excelente cambio de registro, su conectividad y su gran complicidad con un público afín, al que hace levantarse y bailar una y otra vez. Porque como él dice, en este teatro se puede bailar. Bueno, bailar e incluso, aunque tímidamente, beber si uno está en las primeras filas del patio de butacas.

Durante la más de hora y media que dura el espectáculo, se oyen a artistas tan dispares como Kurt Weill, Héctor Lavoe, Lucho Gatica, Chavela Vargas, La Lupe, Gardel, Talking Heads, David Bowie, Rolling Stones. El espectáculo hace un repaso de la música de ayer y de siempre. Aquella que hacía soñar al propio Asier cuando era pequeño, saltar y bailar cuando era un chico y la que ha permanecido en su retina en las diversas fases de la vida.

El apartado musical está sobresalientemente interpretado por el cuarteto formado por Gherardo Catanzaro al piano, el contrabajista Enrico Barbaro, Tao Gutiérrez y Exteandia como solista. Los temas tienen fuerza, empuje, personalidad y nos retrotraen a tiempos pretéritos.

Para enlazar las canciones, Exteandia fantasea junto con el público, que interpreta el rol de sus amigos invisibles en un sueño dentro de un sueño. Y aquí es donde hace agua. Pierde pie. Porque aprovecha la circunstancia para dar breves soflamas en las que la religión es un fácil tema recurrente que desprestigia, bromea pesadamente durante bastantes y pesados minutos, en una especie de minimonólogo que no viene a cuento.

Creo, sinceramente, que el espectáculo tendría mucho más ritmo y sería más dinámico aún, que ya es decir, si se saltara ese pastiche que te saca del gran concierto que se interpreta. ¡Una pena, desde luego! Etxeandia, canta, baila y haznos reír con tus interpretaciones y tu gran talento musical, que lo tienes. No lo desperdicies.

El intérprete

★★★☆☆

Dirección:

Plaza Tirso de Molina 1

Metro:

Tirso de Molina

OBRA FINALIZADA