El Defensor del Pueblo propone la concesión de licencias urbanas especiales en la Cañada Real
La idea es que con ellas los habitantes del poblado puedan solicitar a la compañía eléctrica suministradora la prestación del servicio
El Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, ha propuesto que las administraciones locales concedan licencias urbanísticas especiales a los habitantes de la Cañada Real para que estos, a su vez, puedan iniciar los trámites para solicitar a la compañía eléctrica suministradora la prestación del servicio. La idea es que puedan «otorgarse en contadas ocasiones» y que estén «sujetas a limitaciones».
La propuesta busca que «se acorten los plazos y se agilicen los trámites por parte de las administraciones y de la compañía suministradora para que la electricidad vuelva a los sectores 5 y 6 de la Cañada Real lo antes posible, y desde luego, antes de que comience el invierno», ha explicado Gabilondo, que es una de las figuras públicas que más está presionando para que los habitantes de la Cañada Real no tengan que afrontar un tercer invierno sin energía con la que calentar sus casas.
A pesar de los esfuerzos del Defensor del Pueblo, que ha conminado a las administraciones en numerosas ocasiones a atajar esta «emergencia humanitaria», la propuesta no parece que vaya a prosperar. De hecho, el poblado lleva ya más de dos años en esta situación y nadie parece estar dispuesto a solucionar la crisis definitivamente.
Para los habitantes de la Cañada, que valoran los esfuerzos de Gabilondo, la propuesta del Defensor del Pueblo, sin embargo, llega tarde. «Todavía no estamos oficialmente en invierno, pero da igual. Las bajas temperaturas ya están aquí. Ayer mismo por la noche el frío era insoportable», dice una residente del poblado.
Ante esta situación, el Defensor del Pueblo cree que «las diferentes administraciones, coordinadas por el Comisionado de la Cañada Real, deben adoptar un papel más proactivo para afrontar esta emergencia humanitaria. La Comunidad de Madrid y los ayuntamientos de Madrid y Rivas-Vaciamadrid son actores fundamentales para la resolución de este problema».
Los sectores afectados por la falta de suministro son el 5 y 6, ubicados en los términos municipales de Madrid y Rivas-Vaciamadrid. Allí viven cerca de 3.000 personas, de ellas más de 1.200 son niños, que se ven afectadas por la falta de electricidad que les impide tener una vida digna y que ponen, en algunos casos, en riesgo la salud de muchos de ellos, especialmente personas mayores, enfermos crónicos y niños.