El casco histórico de Oviedo acogerá un espacio cultural de carácter religioso - Alfa y Omega

El casco histórico de Oviedo acogerá un espacio cultural de carácter religioso

El Arzobispado de Oviedo presenta al Ayuntamiento un proyecto para convertir el edificio del Martillo de Santa Ana en un centro cultural «que muestre a la sociedad la belleza que ha emanado de la fe cristiana»

Redacción
Imagen del proyecto del Arzobispado. Foto: Arzobispado de Oviedo

El nuevo proyecto de carácter cultural del Arzobispado de Oviedo se levantará en el solar que se encuentra en lo que hoy se conoce como el Martillo de Santa Ana, en el casco histórico de la ciudad de Oviedo, «un enclave singular al que hay que dar la centralidad y la funcionalidad que el lugar y la sociedad reclaman», explica el vicario general de la diócesis, Jorge Juan Fernández Sangrador.

En este nuevo espacio, la Iglesia aportará muestras del «ingente patrimonio histórico y artístico» que las parroquias de Asturias «han creado y conservado como un preciado tesoro asociado a la fe cristiana, y al que es preciso dar una mayor visibilidad», asegura el vicario general.

Así, en sus salas los visitantes podrán contemplar retablos, imágenes, cuadros, tapices, vidrieras, órganos, ornamentos, códices…, y todo aquello que constituya «una plataforma desde la que la Iglesia interactúe creativamente con otras instancias generadoras, al igual que ella, de cultura».

A pesar de que el Martillo de Santa Ana, actualmente en desuso, ha sido objeto en el pasado de distintos planes de interés social, el Arzobispado de Oviedo considera que con su nueva función ofrecerá «un entorno más que adecuado para la organización de exposiciones temporales», debido a su emplazamiento privilegiado junto al Museo de Bellas Artes de Asturias, la catedral y el Ayuntamiento.

«La Iglesia en España y en otros países del mundo está produciendo constantemente actividades culturales del máximo interés», afirma Fernández Sangrador, iniciativas que también podrán hacerse presentes en Oviedo cuando este nuevo espacio «disponga de unas instalaciones que ofrezcan el grado de excelencia que las cimas del arte religioso exigen para ser expuestas».

En definitiva, se trata de dar a la sociedad «el servicio de mostrarle la belleza que ha emanado de la fe cristiana, arraigada en nuestro suelo desde hace siglos».