El cardenal Omella se reúne con Pablo Casado - Alfa y Omega

El cardenal Omella se reúne con Pablo Casado

Aborda la situación provocada por la pandemia, el trabajo de Cáritas y la labor educativa de la Iglesia

Fran Otero
Juan José Omella con Pablo Casado

El cardenal arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan José Omella, ha recibido esta mañana al presidente del Partido Popular, Pablo Casado, en la sede del Episcopado español.

El encuentro se enmarca, según ha comunicado la Oficina de Información de la CEE a través de Twitter, dentro de las reuniones habituales que el presidente de los obispos está manteniendo con distintos representantes políticos.

Entre los temas abordados por el purpurado y el líder del principal partido de la oposición en nuestro país destacan la situación provocada por la pandemia de la COVID-19, el trabajo a nivel social que viene desarrollando Cáritas y la labor educativa de la Iglesia.

El propio Pablo Casado dio cuenta de ellos a través de Twitter: «Me he reunido con el presidente de la Conferencia Episcopal para reconocer la labor social de la Iglesia en la pandemia con Cáritas, residencias de mayores, hospitales, atención a personas con discapacidad y misiones, así como para defender la libertad educativa de las familias».

El pasado mes de junio, tres meses después de ser elegido presidente, Omella mantuvo el primer contacto con el Gobierno en una reunión en Moncloa con la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, donde acordaron un agenda de trabajo común.

Preocupaciones de los obispos

Las principales preocupaciones de los obispos con respecto a la situación política pasan por la promoción por parte del Gobierno de varias propuestas legislativas como la ley de eutanasia o la ley Celaá y. Propuestas que, según denunció el propio Omella en la última Asamblea Plenaria de la CEE, no son prioritarias en un contexto de pandemia y tensionan la sociedad.

«Dada la situación de emergencia nacional y mundial, deberíamos evitar tensionar más la sociedad política con cuestiones que no sean prioritarias o que requieran de un debate sereno y profundo. Ahora deberíamos centrarnos en encontrar soluciones que ayuden a salir a flote a las familias que se están hundiendo, a los empresarios que no tienen más remedio que cerrar sus negocios. Es conveniente evitar distracciones inútiles y polarizadoras», dijo hace menos de un mes.

Otra de las cuestiones prioritarias tiene que ver con la situación social y económica, con la superación de la crisis y la reconstrucción que, según el arzobispo de Barcelona, debe «priorizar» a los socialmente más vulnerables, esto es, personas y familias en situación de exclusión o al borde de la misma por desempleo.