El Arzobispado de Madrid y las administraciones suman esfuerzos para honrar a san Isidro
El cardenal Osoro firma un protocolo con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; la delegada del Gobierno, Mercedes González, y el alcalde, José Luis Martínez-Almeida
En la sala capitular de la catedral de la catedral de Santa María la Real de la Almudena, ante decenas de medios de comunicación y la figura del patrón madrileño, en los sensacionales mosaicos de Rupnik, este lunes, 4 de abril, se ha presentado el Año Santo de san Isidro. Concedido por el Papa Francisco con motivo de los 400 años de la canonización del santo, arrancará el día de su fiesta, el próximo 15 de mayo, y se prolongará hasta el 15 de mayo de 2023.
En el acto, el arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, ha firmado un protocolo general de actuación con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. El purpurado ha agradecido su implicación y ha incidido en que este es un «año de gracia» no solo para la ciudad, sino también para tantos lugares del mundo en los que se venera a san Isidro.
En este sentido, ha destacado que «hemos querido» que este Año Santo «sea para todos», en unos tiempos en los que se hace más cierto que nunca aquello que le dijo el Papa san Juan Pablo II antes de ordenarle obispo: «Atrévete siempre a gestar comunión y fraternidad». Una comunión de la que fue signo san Isidro, un hombre «sencillo, humilde, un trabajador del campo», un «santo de la puerta de al lado».
Su vida es una llamada constante a no olvidar «que somos hermanos», ha abundado, y «el año jubilar ha de ser, para toda la Iglesia y para nosotros, una renovada invitación […] para aprender a vivir con altura de miras, como lo ha hecho siempre Madrid».
Raíces cristianas
El alcalde ha comenzado su intervención solicitando al arzobispo que traslade al Papa Francisco su agradecimiento «por haber concedido a Madrid el honor y la gracia del año jubilar» y por su cercanía «en estos años tan duros».
Almeida ha valorado que el santo patrón ayuda a «cimentar el futuro desde la humildad» y ha asegurado que la ciudad «quiere celebrar el año jubilar» porque «no olvida sus raíces cristianas», no solo arraigadas en la figura de san Isidro –«siempre de la mano de santa María de la Cabeza»–, sino también en el Señor de Madrid, el Cristo de Medinaceli, y en la Virgen de la Almudena.
La delegada del Gobierno, por su parte, ha asegurado que Madrid es una «ciudad de gente cordial y hospitalaria», con un santo patrón al que ha definido como «una buena persona», dispuesto «siempre a la oración y a la ayuda de quien más lo necesitaba». «Le debemos que seamos los madrileños que somos y los madrileños como somos», ha añadido; un Madrid «de los isidros y las isidras», de aquellos que venían de fuera y se encontraban en un entorno de «tolerancia, respeto y convivencia».
En Madrid «damos mucha relevancia a nuestras tradiciones y a lo mejor de nuestra cultura», y ahora «nos une un proyecto común de festejarnos festejando al santo en su año jubilar», ha continuando González, quien también ha pedido tener especialmente presente a Ucrania y la necesidad de paz.
En esta línea, la presidenta regional ha rememorado que «el pueblo de Madrid se adelantó a las autoridades» con su pronta devoción a san Isidro y ha puesto especial énfasis en la relación de este con la familia real y con «la gente del campo y sus ingenieros».
Díaz Ayuso ha remarcado también que el nombre de Isidro «significa celebración, fiesta y vida» y ha aludido a la música, los toros, el teatro y la gastronomía de unas fiestas que son «universales, mestizas» y que este año se alargarán durante doce meses. «Nos encomendamos al santo patrono –ha concluido–, para que nos ayude en estos tiempos recios sin que perdamos la alegría».
Logotipo y actividades
Durante el acto, en el que ha estado presente la comisión organizadora, se ha presentado el logotipo del Año Santo de san Isidro, elaborado por técnicos del Ayuntamiento en tonos verdes y marrones que remiten a la naturaleza y a la tierra. Se le ha dado un aire castizo inspirado en los azulejos que dan nombre a las calles de la ciudad, y representa al santo de rodillas, en posición orante. En su mano derecha porta una aguijada, su instrumento de trabajo, con forma de gota de agua por los muchos milagros que con este elemento se atribuyen al santo.
Tras la apertura del jubileo con las tradicionales celebraciones en su honor, entre los actos más relevantes de este año destaca la exposición del cuerpo incorrupto del santo para su veneración, del 21 al 27 de mayo, en la colegiata de San Isidro. Un hecho que no se producía desde hace 37 años.
Además de las celebraciones litúrgicas, tendrán lugar las fiestas de san Isidro, recientemente declaradas bien de interés cultural, y el año juibilar vendrá acompañado de multitud de actividades culturales y de ocio. Arrancarán el 14 de mayo con un concierto de la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid en la catedral de la Almudena, al que se sumarán dos exposiciones temporales, un ciclo de cine de verano, espectáculos musicales y teatrales y eventos familiares y deportivos, como una carrera de diez kilómetros en Torrelaguna, la localidad en la que nació santa María de la Cabeza.