Eduardo Francisco Pironio, fundador de las JMJ, será beato
Francisco aprueba el primer milagro del argentino. Reconoce además las virtudes heroicas de los religiosos italianos Giuseppe Marrazzo y Maria Francesca Foresti y de la india Eliswa de la Bienaventurada Virgen María
Eduardo Francisco Pironio, el cardenal argentino que inventó las Jornadas Mundiales de la Juventud, más tarde popularizadas por Juan Pablo II, será beato. En la mañana de este miércoles el Papa ha reconocido oficialmente el primer milagro que se atribuye a su intercesión. Llevaba estudiándose desde el 4 de mayo de este año, cuando la Junta Médica del Vaticano decidió analizar todos los detalles en torno a la curación inexplicable de un niño que en 2007 se envenenó accidentalmente comiéndose un bote de purpurina con una alta concentración de polvo de cobre. Aún se desconoce donde se celebrará este paso a los altares del purpurado, considerado papable en la década de los años 1970 y fallecido en 1998; aunque es muy probable que suceda en su Argentina natal.
Es uno de los decretos que el Papa ha autorizado promulgar al Dicasterio para las Causas de los Santos tras reunirse en la mañana del 8 de noviembre con su prefecto, el italiano Marcello Semeraro. Aunque el de Pironio no fue el único nombre que salió a relucir durante su encuentro.
Francisco ha dado también luz verde al reconocimiento de las virtudes heroicas de Giuseppe Marrazzo, un sacerdote italiano de la Congregación de los Rogacionistas fallecido de improvisto en 1992 en Messina y que era muy conocido por su estilo al confesar. Intentaba seguir el ejemplo de san Leopoldo Mandić, capuchino croata, quien tenía fama de perdonar todos los pecados.
También se han reconocido las virtudes heroicas de la india Eliswa de la Bienaventurada Virgen María (quien nació con el nombre de Eliswa Vakayil). Tras enviudar y dedicarse a la oración y el servicio a los pobres, en 1862 fundó junto al carmelita italiano Leopoldo Beccaro la primera presencia de las Hermanas Carmelitas Teresianas en Kerala, un estado en el sur de India.
Por último, el Santo Padre ha permitido declarar las virtudes heroicas de Maria Francesca Foresti, una italiana que fundó la Congregación de las Hermanas Franciscanas Adoratrices. Discernió su vocación junto al padre Pío, se dedicó a la enseñanza del Catecismo a los jóvenes y falleció en 1953.