Daniel Ortega ahora quiere el dinero de la Iglesia - Alfa y Omega

Daniel Ortega ahora quiere el dinero de la Iglesia

El régimen ha eliminado las exenciones fiscales para asfixiarla económicamente

Ángeles Conde Mir

Ahora el régimen de Nicaragua quiere gravar las limosnas y donaciones que recibe la Iglesia en Nicaragua. Ortega ha modificado la Ley de Concentración Tributaria para derogar un artículo que eximía a las instituciones religiosas del pago del impuesto sobre la renta de actividades económicas. De esta forma, las iglesias en el país tendrán que declarar sus ingresos, es decir, las ofrendas, limosnas, donaciones y aportaciones económicas. Según el ingreso que declaren, tendrán que pagar tasas de entre el 10 y 30%, como si fueran una empresa privada.

Gravando impositivamente estos ingresos, se merma en gran medida la capacidad económica de las iglesias, entre ellas la católica, de forma que se verá comprometida su propia subsistencia. Ya no solo será muy difícil desarrollar su labor caritativa, sino poder mantener a su personal y sus instalaciones. Las donaciones y limosnas constituyen una de las principales fuentes de financiación de la Iglesia nicaragüense.

La activista Martha Patricia Molina ha explicado que Ortega está legalizando lo que, de facto, llevaba meses haciendo que era cobrar impuestos a las iglesias. Asegura que miembros del régimen llevaban semanas visitando varias parroquias para recabar información sobre sus cuentas, ingresos y gastos.

El acoso económico es otra de las formas de persecución puesta en práctica por el régimen sandinista contra la Iglesia. El cobro de impuestos se suma a la reciente decisión de cancelar la personalidad jurídica de 1.500 organizaciones no gubernamentales del país, 700 de ellas religiosas como la Fundación Hermanas Carmelitas del Divino Corazón de Jesús, Asociación de monjes y monjas Agustinos o Cáritas diocesana de Granada. Su patrimonio y cuentas han pasado al Estado.