Ya lo sé. Alguno estará pensando al leer este título: «Ya estamos llamando cultura a cualquier cosa». Creo que en este caso está justificado. Al menos, si por cultura entendemos, como explicaba Robert Scott, un sistema integrado de creencias, valores y costumbres que entrelazan una sociedad y le dan sentido de identidad, dignidad, seguridad y continuidad. Pues, sin duda, en las raíces cristianas de la cultura occidental podemos encontrar, entre otros rasgos, la sinodalidad; ese estilo con el que Jesús provocaba la respuesta libre de sus interlocutores y los invitaba a una experiencia de comunión y participación sin parangón en la historia, para construir una comunidad que «tenía un solo corazón y una sola alma: nadie llamaba suyo propio nada de lo que tenía». (Hechos 4, 32).
El Papa Francisco ha propuesto, justo para estos días que, en toda las diócesis del mundo, se inicie la fase diocesana de un Sínodo sobre la sinodalidad. Parece claro que el Espíritu Santo, que sopla sobre la nave de la Iglesia y sobre el oleaje del mar de la historia, nos llama a todos a una conversión a este modo de escuchar, de pensar, de compartir y de actuar, que precisamente, por ser genuinamente cristiano, es genuinamente humano, y que bien podríamos llamar cultura de la sinodalidad.
Y como a toda impronta cultural, no le faltan buenos libros capaces de transmitir sabiduría y provocar cambios de mentalidad. De entre los recientes, no podemos pasar por alto dos libros con comentarios al documento de la Comisión Teológica Internacional sobre la sinodalidad, uno dirigido por Santiago Madrigal en la BAC, y otro por Piero Coda, miembro de dicha comisión, publicado en Ciudad Nueva. Tampoco el de Raúl Berzosa (publicado por el Centro de Pastoral Litúrgica), y el del salesiano Jesús Rojano (publicado por CCS), más en clave pastoral.
Pero el más reciente, y seguramente el más sintético y el que ahora podría ser el más útil para todo tipo de lectores, es el de Carlos Martínez Oliveras sobre las Diez cosas que el Papa Francisco quiere que sepas sobre la sinodalidad (Publicaciones Claretianas), un libro de bolsillo, sencillo y profundo a la vez, que recoge todas las claves de la sinodalidad y que termina involucrándonos en este fabuloso desafío de secundar al Espíritu Santo sinodalmente, es decir, caminando todos juntos.