¿Cuál de estos actores tiene un trastorno de salud mental?
La obra El teatro de la vida reúne a jóvenes con y sin trastorno de salud mental como un modo de luchar contra el estigma social de la enfermedad
El área de Sensibilización de San Juan de Dios España lanzó hace unos días la iniciativa El teatro de la vida, un proyecto que ha puesto en contacto a jóvenes con y sin trastorno de salud mental, con el objetivo de «visibilizar y romper con el estigma de los problemas de salud mental».
Financiado por el Ministerio de Asuntos Sociales, la obra reunió durante cinco días a jóvenes de los centros de San Juan de Dios de Sant Boi de Llobregat, Lleida, Manresa, Valencia, Ciempozuelos y Bormujos, junto a otros procedentes de centros educativos de diversos lugares de España.
«Cada uno vino con su historia y su mochila», afirma Diana Casellas, responsable del Area de Sensibilización de San Juan de Dios España, que cuenta cómo durante los primeros días «fueron todos contando su experiencia con los trastornos de salud mental, y ahí fueron saliendo los estereotipos a los que muchos se enfrentan en su día a día».
Todo ello se reflejó al principio de la obra que finalmente estrenaron el quinto día de convivencia, después de varias sesiones en las que entre todos fueron articulando el argumento central. Así, salieron a la luz expresiones como «Estás loco» o «Me das miedo», referidas a la salud mental, o más generales como «Eres un vago» o «Nunca vas a llegar a nada en la vida» que muchos jóvenes han tenido que escuchar en su día a día.
«Partimos de la autenticidad», confirma Casellas, «de todos los estigmas y etiquetas que estos chicos han tenido que sufrir. Son cosas que todos ellos han escuchado alguna vez y que no queremos que se reproduzcan más».
«Hemos querido transmitir el mensaje de que no son locos, sino personas que en determinado momento se han roto y que tienen mucho que aportar», añade.
En este sentido, la responsable del Area de Sensibilización de San Juan de Dios España revela que «desde que comenzó la pandemia los problemas de salud mental han aumentado, también entre los jóvenes, tengan o no un diagnóstico detrás».
Así, menciona sobre todo la ansiedad, la depresión y los trastornos de conducta alimentaria como los problemas que más afectan a la población joven a día de hoy. «Hoy los chicos y las chicas están sometidos a una gran presión, y las redes sociales la agudizan sobre todo en la dimensión estética, especialmente en ellas. Al final, todo esto acaba minando su autoestima», afirma.
En general es una generación «muy machacada socialmente a la que se le ha culpabilizado de todo lo que nos pasa. Eso se hace desde el desconocimiento y desde el miedo, y lo malo es que afianza un autoestigma que ellos mismos se imponen».
Por eso es tan importante que los jóvenes «puedan hacer oír su voz» como hacen en esta representación de teatro, cuya gestación verá la luz como un documental en el mes de octubre.
El objetivo es producir en el espectador lo mismo que experimentó Lucía, una de las jóvenes participante en la obra, que cuenta que «he podido ver y vivir de cerca lo que supone tener un problema de salud mental. Esta experiencia me ha tocado mucho. Es un problema real, no son unos datos sin más».
Al final, la empatía que suscita el proyecto es similar a la sensación de Lucía al acabar la representación: «Hoy tengo más vínculo con cualquiera de estas personas a las que no conocía de nada que con muchos amigos míos de toda la vida. Conocernos más de cerca y conocer nuestros problemas es lo que marca la diferencia».