Católicos y Vida Pública finaliza con el propósito de «reevangelizar» la sociedad «ante la crisis de la Verdad»

La 25 edición del Congreso Católicos y Vida Pública ha finalizado este domingo con la publicación de un ambicioso manifiesto que expresa la esperanza de «actualizar el mandato evangélico de Cristo, asumiendo la necesidad de volver a reevangelizar nuestra propia sociedad y siendo conscientes de que los países occidentales son también hoy tierras de misión».

Señala el texto que nuestras sociedades están inmersas en «una crisis de la Verdad, sostenida por la comodidad y el bienestar, pero hemos de comprometernos a la hora de elegir entre una verdad incómoda y una mentira cómoda». Porque aseguran que hay «un contexto adverso» ante el que los cristianos tienen el desafío de mantenerse fieles para preservar «nuestra herencia cristiana como una tradición viva que transmitir a los demás».

La Asociación Católica de Propagandistas y la Fundación Universitaria San Pablo CEU llevan organizando este encuentro durante 25 ediciones. La de este año llevaba por lema Vivir, compartir, anunciar. Evangelizar, y la han clausurado el director del Congreso, Rafael Sánchez Saus, y el presidente de la Asociación Católica de Propagandistas y de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Alfonso Bullón de Mendoza.

Destacadas figuras

«Es el momento de compartir, de seguir adelante con estas iniciativas que nos dan un espíritu claro de comunidad, en el sentido de compartir lo común, que es nuestra fe, y seguir mostrándola en el mundo siguiendo el mandato de la evangelización», animaba en su discurso Bullón de Mendoza. Antes de la lectura del manifiesto final, los congresistas participaron en la Eucaristía dominical presidida por el cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo.

El Congreso ha contado con destacadas figuras a lo largo de estas tres jornadas. Por ejemplo, el fundador y CEO de Mary´s Meals y Premio Princesa de Asturias, Magnus Macfarlane-Barrow, que ha reflexionado sobre la caridad y la fe. O Sebastian Schuff, presidente del Global Center for Human Rights, quien habló sobre los efectos del globalismo y el progresismo.

Una cultura cristiana

Las jornadas contaron con un acto cultural en el que participaron el escritor Enrique García-Máiquez; el cineasta José Luis López-Linares; y el profesor y escritor Alejandro Rodríguez de la Peña. Conducidos por el economista Jorge Soley, debatieron sobre la posibilidad de que exista una cultura cristiana en la actualidad y plantearon la cuestión del silenciamiento de los autores que muestran su fe.

También hubo un Congreso Juvenil que se celebró en el Colegio CEU Sanchinarro y que congregó a más de 300 jóvenes de los colegios CEU y otros centros católicos de la capital. Los congresistas más jóvenes tuvieron la oportunidad de compartir reflexiones con dos influencers como son Pedro del Castillo, que habló de la importancia de la actitud ante la vida; y Quique Mira, un joven del Regnum Christi que explicó cómo fue su conversión y cómo comparte su fe con sus miles de seguidores en redes sociales. Y asistieron a la charla de la madre superiora Verónica, fundadora de Iesu Communio, que invitó a todos a buscar el sentido de la vida en Dios. El Congreso Juvenil finalizó con una Hora Santa, amenizada por el grupo musical Hakuna.