Casi 300 jóvenes madrileños en Javier, peregrinos de Misericordia - Alfa y Omega

Casi 300 jóvenes madrileños en Javier, peregrinos de Misericordia

OMP

La diócesis de Madrid ha participado en la primera gran Javierada del año 2016. Casi 300 jóvenes de Madrid han peregrinado a Javier, cuna del peregrino de la Misericordia, San Francisco Javier, patrono de las misiones. Jóvenes de parroquias madrileñas como la Purificación de Nuestra Señora, Nuestra Señora del Rosario y Colegio San Buenaventura (Franciscanos Conventuales), San Jorge, Santa Casilda y muchas otras, fueron enviados por el arzobispo de Madrid, monseñor Carlos Osoro que fue en persona a bendecir esta peregrinación, alentándoles a vivir esta ocasión del año Jubilar de la Misericordia.

Según explica uno de los peregrinos, el misionero javeriano Rolando Ruiz, «en esta primera javierada hubo muchas ganas de caminar, orar e ir al encuentro del Señor que nos llama. Por la mañana del sábado, en el Seminario de Pamplona en donde habíamos dormido, hemos tenido la gracia de venerar, al término de la Eucaristía matutina, una reliquia de San Francisco Javier, cosa novedosa y que nos ha dado gusto al caminar en su compañía, su vida llena de ardor y pasión por Cristo ya nos animaba a dar nuestros pasos. Han sido 24 kilómetros de marcha que se han vivido con amor. Al final, hemos recorrido el tradicional Viacrucis, en la recta final a Javier, sí, se notaba ya el cansancio, los pies cansados pero la experiencia iba calando en cada uno de nosotros. Nuestro pequeño grupo, como muchos otros, al llegar al Castillo ha tenido la gracia de entrar en el Castillo para contemplar el Cristo de Javier, que sonriente nos acogía, como acogió tantas veces a Francisco de Javier en sus primeros años de vida. Una oración sencilla y con devoción que después nos llevó a la Iglesia de la Asunción, precisamente al bautisterio en donde Javier nació a la vida cristiana. Ahí hemos renovado nuestro compromiso bautismal y por ello misionero».

Por la noche, los jóvenes peregrinos tuvieron una Vigilia de Oración llena de fe y silencio en la Basílica de San Francisco Javier. Monseñor Francisco Pérez, arzobispo de Pamplona y Tudela, les acompañó y les invitó a escuchar siempre la Palabra de Dios para responder a Dios y a su voluntad con mucha generosidad, como hizo el patrono de las misiones en su momento.

Por la mañana, del domingo, se congregaron para la Eucaristía en unión a tantos otros peregrinos, en la que, una vez más, se les invitó a descubrir con alegría la misericordia de Dios viviendo como peregrinos de la misericordia.

«¿Javierada misionera? Sí, por varias razones, la primera es que Francisco de Javier es el patrón de todas las misiones junto a Santa Teresita del Niño Jesús; otra, porque caminar a Javier es para nosotros despertar nuestro bautismo, y desde el bautismo todos somos misioneros; y la última, porque invitamos siempre a jóvenes que se han enganchado con la misión Ad Gentes y nos narran su experiencia», añade Rolando.

En este sentido, Teresa Monedero, joven de 23 años, cuenta que hace dos Javieradas quería irse un año de misiones a Sierra Leona, y el ébola golpeó el país y su idea de misiones, pronto le cambió el destino y pasó a Mozambique. «Nos lo ha narrado con la frescura de quien acaba de regresar de un año de misión, ella nos habló del Colegio en donde vivió su misión, en el Norte de Mozambique y ahí, con su experiencia llena de vida y que aún está digiriendo, ya ha invitado a otros muchos jóvenes, que la han escuchado, a plantearse la vida de la misión. Gracias Teresa por tu misión, por tu entusiasmo y por la invitación que haces con tu vida para vivir la misión desde la edad joven», explica el misionero javeriano.