Cardenal Omella: «Europa necesita más que nunca volver a escuchar la frescura del Evangelio» - Alfa y Omega

Cardenal Omella: «Europa necesita más que nunca volver a escuchar la frescura del Evangelio»

Rueda de prensa del presidente de la Conferencia Episcopal Española: «la Iglesia espera de los jóvenes que sean valientes en vivir la fe»

Begoña Aragoneses
Arturo Ros, Juan José Omella, Raúl Tinajero y Josetxo Vera. Foto: Begoña Aragoneses.

Los jóvenes españoles que participan en la JMJ Lisboa 2023 «son absolutamente jóvenes de su tiempo», pero buscan algo noble porque quieren ser protagonistas de un futuro más «digno», ha afirmado el cardenal Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), en rueda de prensa desde Lisboa. La respuesta la están encontrando en el Evangelio y en la Iglesia, ha afirmado, siempre unidos en la diversidad. Y ha añadido: «Europa necesita más que nunca volver a escuchar la frescura del Evangelio, y esto lo transmiten los jóvenes». Por eso, ha continuado, «la Iglesia espera de los jóvenes que sean valientes en vivir la fe».

En medio de este tiempo de secularización, es un «gozo» ver que los jóvenes «están sedientos de una palabra de esperanza, de vida; y esa palabra viene precisamente del Evangelio». Un tiempo que, por otro lado, es idóneo para la evangelización, ha precisado. Utilizando como imagen la lesión en su brazo izquierdo —el cardenal se cayó el pasado 26 de junio con resultado de dos dedos rotos—, ha asegurado que para acercar a los jóvenes a la Iglesia se necesita, como en el cuadro de Rembrandt del hijo pródigo, las dos manos.

El purpurado ha comentado la llamada del Papa cuando se lesionó: «No se acostumbre a manejar la mano izquierda, necesita también la derecha», le dijo Francisco. Y él, con un símil taurino, le contestó que «los toreros torean con la muleta con la mano izquierda, pero la puntilla la dan con la derecha».

El cardenal Omella, junto al alcalde de Lisboa. Foto: Begoña Aragoneses.

Delegación más numerosa

Sobre lo abultado de la delegación española en Lisboa, que es la más numerosa con cerca de 80.000 inscritos y una previsión de superar los 100.000 peregrinos, significa que «estamos vivos», ha apuntado por su parte Arturo Ros, presidente de la subcomisión episcopal para la Juventud y la Infancia. «Es un gozo inmenso verlos tan felices».

Los jóvenes, ha sostenido, son «quienes hacen posible la JMJ; vienen a Lisboa a vivir su fe y a encontrarse con el Sucesor de Pedro». También, ha matizado, para transmitirle «que están con él, que le quieren, que necesitan su palabra».

Tras los Días en la Diócesis, en los que han participado 12.000 españoles, queda en el corazón el agradecimiento por una acogida «maravillosa», que ha superado todas las expectativas. Raúl Tinajero, director del secretariado de Juventud de la CEE, así lo ha puesto de manifiesto. «Para nosotros es jugar casi en casa; los jóvenes están ya llenos, y ahora vienen a rematarlo con el Papa». Y, desde ahí, «a salir a ser grandes evangelizadores cuando vuelvan a sus comunidades».

El alcalde de Lisboa, Carlos Moedas, ha querido saludar al término de la rueda de prensa a los presentes para dar la «bienvenida a todos los españoles, a nuestro pueblo hermano». «Lisboa es vuestra ciudad durante estos días», ha señalado, para después mencionar al Papa Francisco, «el hombre más inspirador de nuestro tiempo». En estos días, ha concluido, «Lisboa será el centro del mundo» y «todos seremos lisboetas».