La diócesis de Madrid presenta el proyecto Repara en un congreso organizado por el Vaticano
En la cita, organizada por la Pontificia Comisión para la Protección de Menores, más de 100 expertos provenientes de 25 países europeos, están poniendo en común los propios programas de protección de abusos sexuales y los proyectos que ofrecen consuelo y asistencia a las víctimas
Más de 100 expertos de distintas conferencias episcopales, órdenes y congregaciones religiosas, así como sociedades de vida apostólica, provenientes de 25 países europeos, han puesto esta semana en común los propios programas de protección de abusos sexuales y los proyectos que ofrecen consuelo y asistencia a las víctimas en un congreso organizado por la Pontificia Comisión para la Protección de Menores (PCPM) en la sede del organismo en Roma. Según sus organizadores, el objetivo de este evento —que concluye este viernes— es ampliar la red europea que se puso en marcha en Varsovia en 2021 para reflexionar y poner en común las buenas prácticas y los resortes que promueven la salvaguardia de los niños y los adultos vulnerables.
El Proyecto Repara del Arzobispado de Madrid para la atención de víctimas de abusos y la prevención de estos, puesto en funcionamiento en 2020, ha sido una de las iniciativas aplaudidas. Según el programa del evento, el obispo de Teruel, José Antonio Satué —ciudad donde también está operativo— y Lidia Troya, responsable de primera acogida y coordinadora de atención, lo presentaron ante los participantes este miércoles.
«Estamos convencidos de que la Iglesia institucional y la atención a las víctimas deben iniciar caminos de sanación mutua […] como iglesia es posible hacer un camino de conversión con las víctimas. Después de décadas de ceguera y negligencia institucional hemos iniciado este camino de prevención de abusos en la Iglesia», señaló Satué. Por su parte, Troya reseñó, según un comunicado de la archidiócesis de la capital, que a veces parece que en la Iglesia «hay prisa por pasar página». Durante la presentación se habló también del acto de Reconocimiento y Reparación que se vivió en Madrid el pasado 21 de octubre en la Catedral de la Almudena: «El silencio no cura la herida. Para curar es necesario hablar. Sin embargo, a veces no se encuentran palabras, se necesitan otros elementos como el arte, la belleza y la poesía», aseguró Troya.
En un vídeo mensaje difundido ese mismo día a los participantes, Francisco pidió que se establezcan redes «de personas y buenas prácticas» para para poder «compartir conocimientos, apoyarse mutuamente y garantizar que los programas de protección sean eficaces y sostenibles».
«Vuestro compromiso con esta causa es un signo del esfuerzo continuo de la Iglesia para proteger a los más vulnerables», destacó.