La UE acuerda incluir la gestación subrogada como forma de trata
Los activistas pro abolición de esta práctica han aplaudido la medida. «Por fin la gestación subrogada ha sido llamada por Europa como lo que es», celebró Olivia Maurel, ciudadana francesa gestada de esta forma en Estados Unidos
Activistas por la abolición internacional de la gestación subrogada aplaudieron el miércoles 24 de enero el acuerdo para incluir esta práctica dentro de la nueva Directiva de Prevención y Lucha contra la Trata de Seres Humanos de la UE. La presidencia belga del Consejo de la Unión Europea y los representantes de la Eurocámara alcanzaron el pasado martes un acuerdo provisional para que la nueva norma cubra esta práctica, el matrimonio forzado y la adopción ilegal. De salir adelante, estarían penalizados con penas de cárcel de hasta cinco años, o diez si el delito es agravado.
Los promotores de la Declaración de Casablanca, que piden un tratado internacional para la abolición de los vientres de alquiler, se mostraron «animados por este plan para revisar la directiva europea». Así lo aseguraron en una nota de prensa. «Por fin la gestación subrogada ha sido llamada por Europa como lo que es, una nueva forma de trata», celebró Olivia Maurel, ciudadana francesa gestada de esta forma en Estados Unidos y portavoz de la iniciativa.
Bernard García Larraín, doctor en Derecho y coordinador de la declaración, matizó sin embargo que la formulación del delito como «explotación de la gestación subrogada» «puede mejorar». En la información proporcionada por el Consejo de la UE, se afirmaba que esta formulación alude a quienes coaccionen o engañen a las mujeres para que gesten hijos para entregarlos a terceros. Conviene señalar que en diciembre, la Eurocámara aprobó una propuesta de reglamento que obliga a los Estados miembro a reconocer las relaciones paternofiliales establecidas en otro Estado miembro; incluidos los hijos gestados en vientre de alquiler.
«Todos tuvimos que ceder, pero el resultado es bueno», señaló la eurodiputada española Eugenia Rodríguez Palop, de Podemos. Es coponente de la directiva junto con la sueca Malin Björk. «Hoy estamos un poco más cerca de poner fin a esta forma de barbarie». En un sentido parecido, García Larraín señaló que «lo importante es que, por primera vez, el borrador de un texto internacional vinculante establece el vínculo» entre los vientres de alquiler «y el tráfico de personas. Es un paso enorme».
«Aumenta el tráfico»
Desde el grupo, recuerdan que no es la primera vez que el Parlamento Europeo relaciona estos dos conceptos. En una declaración de 2011 sobre la lucha contra la violencia contra las mujeres, pidió a los Estados miembro «que reconozcan el grave problema de la gestación subrogada, que constituye una explotación del cuerpo femenino». Afirmaba además que este tipo de acuerdos «aumenta el tráfico de mujeres y niños y la adopción internacional transfronteriza».
Más recientemente, subrayaba que «la explotación sexual para la gestación subrogada» es «inaceptable y una violación de la dignidad y los derechos humanos». Fue en sendas resoluciones sobre la estrategia de la UE por la igualdad entre hombres y mujeres, de enero de 2021, y sobre el impacto de la guerra contra Ucrania en las mujeres (mayo de 2022)
El pacto que se alcanzó el martes incluye la penalización como delito de la utilización consciente de servicios proporcionados por las víctimas. Así deberán tipificarlo los países de la Unión en su legislación.
También recoge más ayudas a las víctimas y la obligación de que las autoridades de lucha contra la trata y las de asilo se coordinen para que los supervivientes puedan acogerse a protección en la UE. Y refuerza las sanciones a las personas jurídicas, como las empresas, responsables de delitos de trata. Estas podrán ser excluidas del acceso a la financiación pública, incluidos los procedimientos de licitación, subvenciones, concesiones y licencias, y la retirada de permisos y autorizaciones para el ejercicio de actividades que hayan dado lugar a la comisión de la infracción.
Difusión de imágenes sexuales
Teniendo en cuenta el efecto de las nuevas tecnologías, los negociadores han incluido asimismo una nueva circunstancia agravante si los responsables de trata hayan facilitado o cometido la difusión de imágenes, vídeos o material similar de carácter sexual que involucre a la víctima.
«La trata de personas es un acto criminal que tiene un alto costo humano. Esta muy necesaria actualización de la directiva equipará mejor a los Estados miembro para luchar contra este terrible crimen en todas sus formas», dijo en un comunicado el ministro de Justicia belga, Paul Van Tigchelt. El acuerdo provisional alcanzado hoy aún debe ser adoptado formalmente por el Consejo y también por el pleno de la Eurocámara.
Según datos de la Comisión Europea, la explotación sexual y laboral son los principales fines de la trata de seres humanos. Sin embargo, la mendicidad o la extracción de órganos (ya mencionadas explícitamente en la directiva de 2011) y el matrimonio forzado y la adopción ilegal (que no se mencionan explícitamente) representaban en 2020 el 11 % de todas las víctimas en la UE.