La diócesis de Tenerife asegura su oración por el fin del incendio y los evacuados

La diócesis de Tenerife sigue muy de cerca la evolución del incendio que está arrasando miles de hectáreas en la isla y ha asegurado sus oraciones por el fin de las llamas, por las personas evacuadas y por todos aquellos que están trabajando sin descanso en las labores de extinción.

«Seguimos orando por el incendio que afecta a varios municipios de  Tenerife. Tenemos especialmente presentes a las personas evacuadas y a las que trabajan en su extinción», ha asegurado la diócesis a través de la red social X, anteriormente conocida como Twitter.

Poco después del mensaje, el obispo Bernardo Álvarez ha emitido un comunicado en el que pide a Dios por las personas que están trabajando en la extinción de este incendio, para que «no sufran ningún daño y que sus esfuerzos sean eficaces».

El prelado, que ha calificado el suceso como una «tremenda catástrofe», también ha asegurado su oración por las autoridades, «para que acierten en sus decisiones de modo que pronto se pueda controlar y apagar el incendio».

Por último, Álvarez reza por los evacuados con el deseo de que «el Señor les dé paciencia en estos momentos difíciles» y para «que pronto puedan volver a sus hogares».

El obispo ha instado a toda la diócesis a emular este gesto y ha pedido que «se hagan oraciones y se ofrezca la Santa Misa por estas intenciones, y para que podamos afrontar con fortaleza sus consecuencias».

3.273 hectáreas quemadas

Según los últimos datos del Gobierno de Canarias, el fuego continúa fuera de control tras haber afectado a una superficie de 3.273 hectáreas en un perímetro de más de 40 kilómetros que abarca los municipios de Arafo, Candelaria, El Rosario, La Orotava, Santa Úrsula, La Victoria, El Sauzal y Tacoronte, con afectación a masa forestal (pinar), en su mayor parte en el monte de La Esperanza y la corona forestal.

A primera hora de la mañana, los medios aéreos han vuelto a la zona del incendio para descargar sobre él sus depósitos de agua. Debido a la llegada de la noche, los aviones y helicópteros se tuvieron que retirar y se quedaron trabajando 226 efectivos por tierra, apoyados por un centenar del dispositivo de seguridad y 40 de logística.

3.000 evacuados

El incendio ha provocado la evacuación de más de 3.000 personas y que otras 3.820 tengan que permanecer confinadas en sus casas de La Esperanza, en El Rosario. Para atender a la población desplazada, se han habilitado albergues en El Rosario, La Orotava, Candelaria, El Sauzal y La Matanza, donde se encuentran más de un centenar de vecinos.

Durante la noche, además del confinamiento de La Esperanza, se decidió evacuar la zona alta de la Calle Vera, en Santa Úrsula.