Las Iglesias de Europa piden que este Pentecostés ilumine a «quienes buscan la violencia»
El Espíritu Santo «puede sanar y reconciliar a la humanidad y transformar la sociedad», como está ocurriendo con la acogida a los refugiados, subrayan COMECE y la CEC
En vísperas de Pentecostés, las iglesias de Europa han mostrado su esperanza de que «el mismo Espíritu» que se derramó en el cenáculo «ilumine las mentes de quienes buscan la violencia y les dé un corazón de carne». «Su poder puede sanar y reconciliar a la humanidad y transformar la sociedad», apuntan.
En un mensaje conjunto con motivo de esta solemnidad, la Comisión de las Conferencias Episcopales de la UE (COMECE) y la Conferencia de Iglesias Europeas (CEC) piden que «el mensaje de búsqueda de la unidad en la diversidad inspire a los que tienen responsabilidad política en Europa, para que sus decisiones estén guiadas por la sabiduría, la integridad y la compasión», al servicio del bien común.
El mensaje traza un paralelismo entre los desafíos a los que se enfrentaba la primera comunidad cristiana en el momento de la efusión del Espíritu Santo, y los retos de los cristianos actuales. Estos viven su fe en «un mundo profundamente herido por la violencia, la inequidad y la división. Mientras la brutal guerra contra Ucrania prosigue con furia, continúa la crisis humanitaria». Además, siguen surgiendo «consecuencias sociales y políticas, junto con desigualdades económicas», que muestran «la polarización y fragmentación de nuestras sociedades».
Apoyo a los refugiados
Sin embargo, los representantes de los católicos, protestantes y ortodoxos de Europa subrayan como, en este contexto, «los cristianos de hoy siguen estando llenos del Espíritu», que los guía. Apoyado en él, el pueblo de Dios «adquiere una comprensión más profunda del Evangelio y se implica en un servicio transformador para un mundo justo, pacífico y esperanzado». Muestra de ello y signos de esta acción del Espíritu es, por ejemplo, «el apoyo a los refugiados por parte de las iglesias». De esta manera, «responden a las necesidades humanitarias de Ucrania, expresan su solidaridad con las víctimas de esta trágica guerra, y trabajan activamente por la paz en el continente».
El mensaje concluye recordando que COMECE renovó hace poco a su presidente, con la elección de Mariano Crociata, y su Comité Permanente; y que la Conferencia de Iglesias Europeas lo hará en su Asamblea General en Tallín (Estonia), del 14 al 20 de junio. Por ello, piden también oraciones par que «el Espíritu nos guíe e ilumine», y «por nuestro testimonio común y nuestro trabajo por el bien del proyecto europeo».