¡Hoy es Navidad! - Alfa y Omega

¡Hoy es Navidad!

María Dolores Gamazo
Foto: AFP / Miguel Álvarez.

Desde hace más de un mes nos lo anunciaban las luces de colores y los anuncios publicitarios que nos invitan a consumir aún más, porque es Navidad. Aunque no entiendo la relación. Quizás los encargados de conseguir cada vez mejores resultados de ventas asocian los sentimientos de alegría, esperanza, solidaridad, ilusión… que nos invaden a los creyentes al saber próxima la Natividad, con la efímera sensación de felicidad que produce el tener cada vez más. Aunque quizás piensen, y puede que no se equivoquen, que la grandeza del acontecimiento que celebramos es tan importante como para tirar la casa por la ventana.

Lo malo es que hay gente que no tiene casa para tirar. Si miramos alrededor, quizás no los descubramos, a no ser que prestemos mucha atención. Pero están ahí. No tienen familia ni amigos con los que compartir estos momentos; quizás sus seres queridos estén en el hospital o pasen momentos delicados de salud; puede ser que estas fechas traigan recuerdos de otros instantes más felices vividos junto a personas que ya no están aquí; es posible que lo hayan perdido todo y no tengan trabajo, casa, familia… Y que ni siquiera la soledad sea su mal mayor, porque a ella se le puede sumar el no tener un techo donde dormir, un poco de pan que llevarse a la boca, un gesto que hable de amor sin exigencias…

¡Hoy es Navidad! Esta noche nos nace el Salvador, cuya llegada hemos venido preparando en nuestros corazones durante todo este Adviento. Este año, con un aliciente nuevo: la apertura del Jubileo del Año de la Misericordia, que nos invita a dar a los demás ese amor que hemos recibido sin medida.

Hace unos días, en la fiesta de Navidad del colegio, los pequeños nos recordaban los momentos más importantes de este Nacimiento: la preocupación de José por encontrar posada y la negativa del mesonero a acogerles, la expectación de María ante el nacimiento de su Hijo, la alegría de los pastores al encontrar al Niño recién nacido, la adoración de los Magos venidos de Oriente… Y nos decían: Él nos dio su Amor. Nos lo ha dado todo. Ahora nos toca a nosotros. ¿Qué podemos hacer?

Miremos al que está a nuestro lado. Quizás ahí encontremos la respuesta para que Dios pueda nacer hoy, y cada día, en nuestro corazón.

Hoy es Navidad.