Benedicto XVI ha anunciado un nuevo consistorio, para el próximo 24 de noviembre, el quinto desde su elección a la sede de Pedro, para la creación de seis nuevos cardenales. Entre ellos, no hay ningún italiano ni ningún europeo; y tampoco hay ningún miembro de la Curia, en sentido estricto, algo que no sucedía desde hace 85 años. El Santo Padre ha afirmado que estos nombramientos tienen lugar «precisamente en el contexto de la nueva evangelización», por lo que son «un gesto de universalidad de la Iglesia, mostrando que la Iglesia es Iglesia de todos los pueblos, habla todas las lenguas, es siempre Iglesia de Pentecostés; no Iglesia de un continente, sino Iglesia universal»; junto a ello, los nuevos cardenales son un reconocimiento a las Iglesias locales que pasan por «sufrimientos, amenazas, peligros y alegrías», caso del Líbano, de la India y, en los últimos tiempos, particularmente de Nigeria. Tras la celebración del Consistorio, con estos nuevos miembros, el Colegio cardenalicio se compone de 211 cardenales, de los cuales 120 son electores, al tener menos de 80 años. Éstos son los seis nuevos cardenales:
• Monseñor James Michael Harvey, estadounidense, de 63 años de edad, es prefecto de la Casa Pontificia desde 1998, responsabilidad que abandonará para ser Arcipreste de la basílica papal de San Pablo Extramuros.
• Su Beatitud Béchara Boutros Rai, de 72 años de edad, Patriarca de Antioquía de los Maronitas (Líbano), que recibió en marzo de este año la comunión eclesiástica del Papa Benedicto XVI, y ha participado en el reciente Sínodo de los Obispos. En septiembre acogió al Papa en la Visita apostólica que el Santo Padre hizo al Líbano.
• Su Beatitud Baselios Cleemis Thottunkal, Arzobispo Mayor de Trivandrum de los Siro-Malankares (India), de 53 años de edad, será el miembro más joven del actual Colegio cardenalicio, y también ha participado en el último Sínodo de los Obispos. Ha declarado que su nombramiento es «un reconocimiento de la contribución de la Iglesia siro-malankar, que tanto hace por la evangelización, a la Iglesia universal».
• Monseñor John Olorunfemi Onaiyekan, arzobispo di Abuja (Nigeria), de 68 años de edad, ha sido presidente del Simposio de las Conferencias Episcopales de África y Madagascar, y ha trabajado en las tareas del Sínodo. Al conocer su nombramiento, ha afirmado que «es una buena noticia para Nigeria, después de tantas malas noticias (en referencia a los atentados contra cristianos que han azotado el país en los últimos meses). Cristianos y musulmanes dicen que es un honor para Nigeria».
• Monseñor Rubén Salazar Gómez, arzobispo de Bogotá (Colombia), de 70 años de edad, es el actual presidente de la Conferencia Episcopal, y también vicepresidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM). El episcopado colombiano ha señalado que este nombramiento es un don en favor de nuestra Iglesia y de la paz en Colombia», precisamente cuando el cardenal electo ha pedido a las FARC que decreten una tregua unilateral.
• Monseñor Luis Antonio Tagle, arzobispo de Manila (Filipinas), de 55 años, ha sido miembro de la Comisión Teológica Internacional (CTI). Ha participado en el Sínodo de los Obispos formando parte como vicepresidente de la Comisión encargada de preparar el Mensaje final; y ha declarado que su nombramiento «es una llamada para Manila y Filipinas, para que nos tomemos en serio nuestra misión de evangelizar, especialmente en Asia».