La UCAM impulsará en España las medidas que pide la Santa Sede a favor de los mayores
El presidente de la Pontificia Academia para la Vida, Vincenzo Paglia, ha explicado en este centro universitario las políticas públicas que Italia desarrollará junto al Vaticano en esta materia
«Actualmente hay muchas más personas mayores que en cualquier otro momento de la historia, y el problema es que cuando envejecemos física o mentalmente somos rechazados, por lo que es fundamental redescubrir la solidaridad entre las distintas generaciones, porque la vitalidad de la sociedad es el encuentro de todas ellas», ha asegurado monseñor Vicenzo Paglia, presidente de la Pontifica Academia para la Vida, en la Universidad Católica de Murcia, en donde ha impartido la conferencia La edad por inventar. La vejez entre la memoria y la eternidad.
Paglia ha explicado que la Iglesia Católica ha elaborado una Carta de Derechos de los Mayores y Deberes Comunitarios, con propuestas para que de ella se deriven políticas públicas, para lo que ya en Italia se ha creado una comisión mixta formada por representantes de su Gobierno y la Santa Sede, en tanto que la UCAM le va a hacer una propuesta en el mismo sentido al Gobierno de España. Para José Luis Mendoza, presidente de la UCAM, «es fundamental que se respeten los derechos de los mayores y poner los medios para que reciban la atención que necesitan y vivan dignamente».
La Carta reclama el derecho de los mayores a permanecer en su propio domicilio, adecuadamente atendidos, el mayor tiempo posible, ya que para ellos el hogar es el lugar de sus afectos y su memoria, de su historia y su experiencia.
Aborda también el cuidado responsable a estas personas, que tienen derecho a participar en la definición de los itinerarios de atención, tipos de tratamiento y en cómo se les va a prestar la atención sanitaria y social, debiendo ofrecerles las instituciones y profesionales de estos ámbitos todas las opciones disponibles.
La tercera sección del documento aborda el derecho a una vida de relación activa, debiendo evitar las instituciones y la sociedad cualquier forma de confinamiento, gueto o aislamiento que les impida interactuar libremente con personas de todos los grupos de edad. Asimismo, se debe garantizar el apoyo a las familias con personas mayores que deseen seguir con su convivencia.
En definitiva, ha explicado monseñor Vincenzo Paglia, es necesaria una verdadera revolución cultural que se base en una política y economía nuevas: «La sociedad siente a los ancianos como una carga, cuando es una riqueza; todo depende de cómo realicemos el desarrollo de la sociedad. Si este expulsa a una parte de la humanidad se definirá como inhumana. Tenemos que conquistar una nueva perspectiva humanística con las cuatro generaciones», ha concluido.