El Vaticano identificó 89 operaciones financieras sospechosas en 2020

La Autoridad de Supervisión y Información Financiera (ASIF), el organismo de control de las finanzas de la Santa Sede, realizó en 2020 un total de 89 informes de actividad sospechosa, un 39 % más que el año anterior, cuando fueron detectadas un total de 64 actividades sospechosas. Así se desprende del Informe 2020 de la entidad publicado este jueves, informa Europa Press.

El documento revela, además, que se intercambiaron 49 solicitudes de información con otras autoridades vaticanas sobre 124 temas, algo que para la Santa Sede es, además de «un crecimiento importante respecto al año anterior», la confirmación de «las importantes sinergias que se han creado entre las instituciones de la Santa Sede y el Estado de la Ciudad del Vaticano en el conflicto a las actividades delictivas».

Gracias a dos protocolos de entendimiento a nivel internacional con la colaboración activa de las fuerzas de investigación del Vaticano, la ASIF intercambió 58 solicitudes de información con las Unidades de Información Financiera (UIF) extranjeras sobre 196 temas, respecto a las 18 contestaciones que se produjeron en 2019; y envió 19 comunicaciones espontáneas sobre 104 temas.

En total, la Santa Sede intercambia información fiscal con 60 jurisdicciones extranjeras. Las últimas fueron Finlandia, las Islas Cook, la República Checa y Serbia.

La publicación del informe se produce doce días antes de que el tribunal del Vaticano siente en el banquillo de los acusados al cardenal Angelo Becciu, a quien el Papa destituyó por su dudosa gestión de los fondos reservados de la Secretaría de Estado en la compra opaca de un inmueble de lujo en Londres que causó un agujero millonario en las arcas del Vaticano. Además, por este caso, el Vaticano procesará a otras nueve personas.