Sant'Egidio: «La eutanasia es característica de sociedades utilitaristas»
En un comunicado hecho público este lunes, considera que la nueva ley es un «atajo» para no plantearse el problema de cómo ayudar a los más débiles
La Comunidad de Sant’Egidio ha hecho público un comunicado en el que lamenta que España se haya convertido en el sexto país del mundo en legalizar la eutanasia y recuerda que antes de regular la muerte «habría que hablar y reflexionar sobre cómo proteger mejor la vida».
«La eutanasia es característica de sociedades utilitaristas que prefieren planificar dramáticos atajos para no plantearse el problema de cómo ayudar a los más débiles», añade. Así, constata que, aunque se plantea la necesidad de afrontar la muerte sin dolor, «todavía se hace muy poco para no dejar a nadie abandonado y desesperado».
Cita, en concreto, que más del 60 % de los pacientes «siguen muriendo con dolor por la falta de desarrollo de los cuidados paliativos» o los más de 30.000 fallecidos que provocado la COVID-19 en nuestro país. «La desesperación y el sufrimiento de los ancianos que han vivido la pandemia en primera línea gritan a favor de la vida y son también una petición de compañía y de ayuda, que expresa el deseo de curación y de futuro», clama.
La Comunidad de Sant’Egidio sabe bien de lo que habla, pues en su trabajo con los ancianos más pobres, solos y enfermos ha descubierto «que la vida se puede humanizar incluso cuando la enfermedad, el dolor o el miedo a la muerte hacen la vida menos deseable».
Cambio de modelo
«Este es el momento de decir a aquellas personas ancianas que tienen la sensación de que envejecen solas y de manera inhumana que queremos envolverlas de compañía, ternura y amor, porque necesitan más protección, no menos», afirma, antes de proponer a todos los partidos políticos un cambio de modelo de cuidado y de atención a los ancianos, de modo que puedan quedarse en casa.
«Debemos superar el actual sistema que tiene como columna vertebral la institucionalización de los ancianos para pasar a un sistema que prevea el cuidado de los ancianos a domicilio, con una asistencia que incluya aspectos sociales y sanitarios. Ayudemos a los ancianos y a las personas más frágiles no a morir, sino a vivir», concluye el comunicado.