El Papa, a los católicos chinos: «La Iglesia comparte vuestras esperanzas y os sostiene en la prueba»
Durante el rezo del Regina caeli, Francisco se dirigió a los fieles de este país, que este domingo celebran la Jornada de Oración por la Iglesia en China y la fiesta de Nuestra Señora de Sheshan
Primer Regina caeli con fieles en la plaza de San Pedro. Sin embargo, como los domingos anteriores, el Papa Francisco lo dirigió desde la Biblioteca del Palacio Apostólico. Eso sí, se encontró con ellos en el saludo posterior a esta oración mariana que antes lanzaba a una plaza vacía desde la ventana.
Justo antes de ese reencuentro, el Papa Francisco se dirigió a los católicos chinos que celebran este 24 de mayo la Jornada de Oración por la Iglesia en China y la fiesta de Nuestra Señora de Sheshan: «Os aseguro que toda la Iglesia, de la que sois parte, comparte vuestras esperanzas y os sostiene en la prueba de la vida». Les pidió que resplandezca en ellos «la belleza y luz del Evangelio» y les impartió «una especial bendición».
En la fiesta de María Auxiliadora, Francisco puso delante de la Virgen a todos aquellas personas que «en estos tiempos difíciles, trabajan con pasión y empeño por la paz, por el diálogo entre las naciones, por el servicio al pobre, por la custodia de la Creación, por la victoria de la humanidad sobre la enfermedad del cuerpo, del corazón y del alma».
También recordó que este domingo se celebra la Jornada Mundial de la Comunicaciones Sociales y el quinto aniversario de la encíclica Laudato si. En primer lugar, recalcó la necesidad de contar historias constructivas que muestren que «todos somos partes de una historia más grande que nosotros mismos y que podemos ver el futuro con esperanza». Sobre la segunda cuestión, Francisco pidió a los fieles que se unan al Año Laudato si, que comienza este domingo: un año para reflexionar sobre la encíclica y para reforzar el compromiso por el cuidado de la casa común y de los más pobres.
El deber del testimonio
Antes del Regina caeli, el Pontífice afirmó, al hilo de la fiesta de la Ascensión, que anunciar el Evangelio hoy «implica en primer lugar el deber del testimonio. […] Estamos llamados a dar razones de nuestra fe».
Una presencia en el mundo que, según el Papa, Jesús ha renovado: «Jesús está presente en el mundo, pero con otro estilo, con el estilo del Resucitado, es decir, una presencia que se revela en la Palabra, en los sacramentos, en la acción constante e interior del Espíritu Santo».
Y concluyó: «A través de su Espíritu, conduce a la Iglesia a caminar por la historia como la compañera de todo hombre».