36 competirán en nombre de 100 millones
El Comité Olímpico Internacional ha presentado el Equipo Olímpico de Refugiados para París 2024. Son jóvenes de países en conflicto como Siria, Afganistán, Cuba, Venezuela, Congo, Eritrea e Irán
Nigara es una judoca afgana y está a punto de volver a cumplir un sueño: participar por segunda vez en unas olimpiadas. Lo hizo en Tokio 2020 y ha sido seleccionada para París 2024. Sin embargo, tampoco esta vez representará a su país, Afganistán, del que huyó con su familia hace 15 años. Le sucede lo mismo a Eyeru, ciclista. Ella participa por primera vez en unas olimpiadas, pero no puede representar a Etiopía porque tuvo que abandonar el Tigray en 2021.
Son dos de los 36 atletas, hombres y mujeres, que conforman el Equipo Olímpico de Refugiados para París 2024. El Comité Olímpico Internacional ha revelado hoy sus identidades. Representan a once países distintos como Cuba, Irán, Siria, Camerún, Venezuela, Congo o Sudán. Por tercera vez en los Juegos Olímpicos, el Equipo Olímpico de Refugiados del COI representará a los más de 100 millones de personas desplazadas en todo el mundo.
Este combinado de atletas refugiados del COI fue creado por primera vez para los Juegos Olímpicos de Río en 2016. Ese año diez atletas, todos ellos con el estatus de refugiados de la ONU, participaron en la cita olímpica. La conformación de este equipo de refugiados quiere ser una llamada de atención sobre la situación de millones de personas en el mundo, así como «un mensaje de esperanza para todos los refugiados», en palabras del presidente del COI, Thomas Bach. «Con vuestra participación en los Juegos Olímpicos, demostraréis el potencial humano de resiliencia y excelencia», apostillaba desde Suiza el presidente.
Durante la ceremonia de presentación del equipo, la jefe de misión del Equipo Olímpico de Refugiados, Masomah Ali Zada, quien compitió para el Equipo Olímpico de Refugiados en Tokio 2020, recordó a los atletas que los Juegos constituyen «una oportunidad para demostrar al mundo de lo que son capaces los refugiados».
La mayoría de los atletas fueron seleccionados entre deportistas refugiados apoyados por el COI a través del Programa de Becas para Atletas Refugiados financiado por el programa de Solidaridad Olímpica del COI y gestionado por la Fundación Olímpica para los Refugiados. Además de apoyar a los atletas de élite en su participación en los Juegos Olímpicos, la Fundación trabaja para garantizar el acceso a un deporte seguro para las personas afectadas por el desplazamiento en todo el mundo.