Día Mundial de las Madres y los Padres: «La familia ha sido el arma secreta de la sociedad durante la pandemia»
La conciliación, el teletrabajo, la corresponsabilidad en el hogar y lo aprendido en familia durante el confinamiento han sido los contenidos de la mesa redonda online que ha organizado The Family Watch con motivo del Día Mundial de las Madres y de los Padres decretado por Naciones Unidas cada 1 de junio
«En esta pandemia, la crisis tiene cara de padre y de madre», dijo Begoña Villacís, vicealcaldesa de Madrid, durante la mesa redonda online que tuvo lugar este lunes 1 de junio con motivo del Día Mundial de las Madres y de los Padres decretado por la ONU. «Tenemos que felicitarnos porque después de esto tenemos el cielo ganado», señaló Villacís, para quien la familia «es el lugar donde se educa y donde se cuece todo lo importante. Si hay una institución a proteger, esa es la familia». Junto a ello, Villacís reveló que según los estudios del Ayuntamiento de la capital de España, las realidades más afectadas están siendo las familias con hijos, «pues familias que no eran usuarias de los servicios sociales los estamos empezando a ver ya acudiendo a pedir ayuda».
Las especiales circunstancias del confinamiento han hecho que a partir de ahora «necesitemos una colaboración más intensa público-privada, porque nos hacen falta todas las manos en este momento de emergencia», dijo Javier Cremades, presidente de World Jurist Association, para quien «el Estado tiene su propia estructura y la sociedad civil también la tiene, pero hay una que es la primera de todas: la familia. Es el arma secreta de la sociedad, y en este tiempo de pandemia ha sido determinante. Precisamente cuando las redes de apoyo se han hecho débiles, la familia se ha hecho más fuerte».
Ha sido un tiempo de aprendizaje «en el que hemos tenido que bajar la autoexigencia y el estrés de intentar llegar a todo en todo», afirmó la empresaria y consultora Pilar Jericó, quien indicó que «de repente nos hemos dado cuenta de la importancia y la potencia de la familia como factor de transformación social». En estos meses «ha habido que desarrollar la compasión y la empatía, hemos tenido que aprender a reconciliarnos con nosotros mismos, ha habido reencuentros familiares maravillosos», todo lo cual ha constituido «un aprendizaje muy positivo» que nos ha permitido «reconocer quiénes somos en situaciones difíciles», porque «en la vulnerabilidad descubres a las personas».
Teletrabajo, conciliación y corresponsabilidad
En el ámbito de la empresa, muchas cosas han empezado a cambiar, como por ejemplo el teletrabajo, «que ha venido para quedarse», dijo Pilar Jericó. Para Inés Rovira, directora del Fórum Instituto de la Empresa Familiar, «se ha llevado a cabo con éxito y eso cambiará las costumbres, no podemos seguir siendo tan estrictos con la presencia física». Según Jericó, aquellos jefes que saldrán reforzados de esta crisis serán «los que hayan tenido una sensibilidad auténtica hacia las personas, los que se hayan preocupado no solo por sus empleados sino también por sus familias», algo en lo que abundó también Javier Cremades cuando dijo que «en mi despacho estamos felices de poder trabajar en remoto en este momento» y que «a partir de ahora hay que ser muy salvaje como para no poner por delante la salud de las personas».
Sin embargo, no todo son parabienes, pues, para la vicealcaldesa de Madrid, «el teletrabajo es muy bueno, pero no mientras te gatea una niña por las piernas». De este modo, «hay que pensar en los padres y madres para que podamos conciliar de verdad», y para ello, «la mejor manera de que las madres puedan conciliar es fomentar la corresponsabilidad de los padres».
Se trata de un aspecto fundamental la para la consultora Pilar Jericó: «la corresponsabilidad en muchas casas ha brillado por su ausencia. Hay por desgracia muchos hombres que no lo tienen claro. Tenemos que ser corresponsables, no todo el peso del día a día puede recaer en la madre. Una familia no sale adelante solo con el esfuerzo de uno solo de sus miembros». Según Cremades, en este tema «debemos cuidar el lenguaje», porque «un hombre no ayuda en casa, sino que él mismo lleva la casa junto a su mujer». De igual manera, en estos meses «hemos puesto en valor el trabajo en el hogar, porque llevar una casa es un trabajo enorme».
Empresa y familia
En la mesa redonda también estuvo presente la perspectiva de la empresa familiar, para la que el confinamiento «ha sido un golpe muy duro», dijo Inés Rovira. Sin embargo, «la que no se quede por el camino saldrá reforzada, sin ninguna duda». «Es verdad que ha habido damnificados –abundó Mario Sandoval, cocinero dos estrellas Michelin, que durante estos meses ha servido 1.500 comidas diarias a personas necesitadas de Vicálvaro–, pero también ha sido un tiempo de reencuentro y de volver a vivir el silencio, un tiempo en el que uno ha podido volver a encontrase a sí mismo para dar lo mejor de sí, exactamente igual a como sucede en una familia».
Desde el lado más institucional, Patricia Bezurnatea, directora general de Diversidad Familiar del Ministerio de Derechos Sociales, afirmó que es necesario «reconocer la labor de los padres y madres» durante estos meses, pues se ha demostrado que la familia «sustenta la sociedad y conforma sus cimientos con su labor de crianza y educación». Después de esto, «o salimos juntos o no salimos. Necesitamos sumar para construir un mundo más sencillo para padres y madres».
En este sentido, la directora general de Infancia, Familias y Natalidad de la Comunidad de Madrid, Ana Sastre, afirmó que «estamos en el momento idóneo para reflexionar sobre cómo prepararnos para una situación del todo desconocida como la que viene. Lo que hemos vivido ha puesto la importancia de la familia. Nunca nos hemos sentido tan padres y tan madres. Todo esto nos ha puesto a prueba».
Por último, la directora general de The Family Watch, María José Olesti, cerró el encuentro valorando cómo la pandemia está siendo «una oportunidad para reflexionar sobre la labor diaria de las familias en todo el mundo, que se están llevando la peor parte de la crisis: los padres tienen que compaginar las responsabilidades de proteger sus hogares y de asistir a sus hijos en sus tareas escolares con su actividad laboral. Desde la ONU nos recuerdan que sin los padres y madres la salud y la estabilidad de los niños están en riesgo. Por eso tenemos como reto proteger a los padres y a las madres como líderes en la socialización y educación de sus hijos, y considerar sus dificultades para integrar la vida personal, familiar y laboral».