1.052 cristianos detenidos injustamente en 2019
ACN Reino Unido presentó el miércoles su informe Libera a tus cautivos. «Los gobiernos occidentales ignoran con demasiada frecuencia» estos casos para no perjudicar sus intereses, denuncia un exparlamentario inglés
10.500 habitantes del Reino Unido han firmado ya una petición para que el país conceda asilo a Maira Shahbaz y su familia. En abril, esta niña de 14 años fue secuestrada cerca de su casa a las afueras de Faisalabad (Pakistán). Un musulmán apellidado Nakash alegó días después que la muchacha tenía 19 años y se había casado y convertido al islam por propia voluntad. A pesar de que un imán invalidó el supuesto matrimonio, el 4 de agosto el Alto Tribunal de Lahore dio la razón al secuestrador. Maira logró escapar en la noche del 18 del mismo mes, y denunció ante la Policía que Nakash la había drogado y violado mientras la grababa en vídeo.
Desde un lugar secreto, donde está escondida con su familia para escapar de las amenazas de muerte, Maira compartió el miércoles su testimonio durante la presentación virtual del informe Libera a tus cautivos, elaborado por Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN por sus siglas en inglés) Reino Unido. En el marco de la Semana Roja por la Libertad Religiosa que se celebraba del 18 al 25, el informe denuncia las detenciones injustas de cristianos cometidas por las autoridades, por agentes no estatales como grupos terroristas, o por particulares. ACN se hace eco de datos de la entidad Open Doors, que estima que en 2019 las sufrieron 1.052 personas.
Se puede hacer mucho
Su informe se centra en los testimonios de China, Eritrea, Nigeria y Pakistán. Pero son solo «algunos de los terribles casos» que se dan en todo el mundo, subraya a Alfa y Omega el exparlamentario inglés Robert Flello, que también intervino en el acto. «Los gobiernos occidentales los ignoran con demasiada frecuencia» para no perjudicar «sus objetivos económicos» o de política exterior. «Pero no tiene por qué ser así». En Estados Unidos y Reino Unido existen leyes que permiten imponer sanciones a los responsables, y otros ejecutivos «podrían seguir el mismo camino». También los parlamentarios deben jugar su papel, presionando a sus partidos y dando publicidad a este tema en sus intervenciones, parlamentarias o no.
Pero para ello, es necesario que «se vea la persecución religiosa como el grave abuso de derechos humanos que es». Y aquí tienen un papel fundamental los ciudadanos. Flello los invita a dar publicidad a este tema en las redes sociales, contactar de forma constante con sus representantes hasta que actúen («y agradecérselo»), escribir a las embajadas de los estados perseguidores o «usar su poder económico, por ejemplo si en un país opresor hay una fuerte presencia de compañías petrolíferas».
La presentación de Libera a tus cautivos en el Reino Unido sustituye este año a la del Informe de Libertad Religiosa de ACN. Esta investigación bienal debía haber visto la luz este mes. Pero, debido a la pandemia, la fundación pontificia la publicará en abril.