Ya está abierta la quinta y última Puerta Santa del Jubileo
«La esperanza es, sin duda, el don más hermoso que la Iglesia puede ofrecer a toda la humanidad, especialmente en este momento de su historia», ha afirmado el cardenal James Michael Harvey
La basílica de San Pablo Extramuros ha sido la protagonista en este domingo, en el que el cardenal arcipreste James Michael Harvey ha abierto la quinta y última Puerta Santa de este Jubileo de la Esperanza convocado por el Papa Francisco. Ya se encontraban abiertas las Puertas Santas de la basílica de San Pedro, San Juan de Letrán y Santa María la Mayor, a las que se suma también la puerta abierta en el centro penitenciario de Rebibbia, por disposición especial del Santo Padre.
Durante la ceremonia celebrada este domingo, el cardenal ha destacado la alegría y la esperanza que nacen de este gesto. En un mundo «marcado por tragedias, guerras y crisis de todo tipo, la apertura de la Puerta Santa marca el paso salvífico abierto por Cristo con su encarnación, muerte y resurrección, llamando a todos los miembros de la Iglesia a reconciliarse con Dios y con el prójimo», ha explicado.
Además, ha recalcado que este jubileo nos pide expresamente «que nos hagamos peregrinos», como en cada Año Santo, y nos invita a sentirnos parte de una comunidad «que lleva dos mil años recorriendo los caminos de este mundo, anunciando la resurrección del Señor Jesús».
Asimismo, el cardenal ha invitado en su homilía a vivir esta experiencia de forma que emprendamos «un viaje espiritual» y reavivemos «la llama de la esperanza en los corazones». Pero no solamente tener esperanza, sino también irradiarla, ser sembradores de ella. «Este es, sin duda, el don más hermoso que la Iglesia puede ofrecer a toda la humanidad, especialmente en este momento de su historia», ha afirmado James Michael Harvey.