Una década viajando de Vallecas al Congo
El profesor Enrique Barrio lleva 10 años ayudando al Hospital Monkole y organizando un voluntariado en el país africano. «La gente está muy agradecida», asegura
Desde Vallecas hasta el Congo. Este es el viaje que el profesor Enrique Barrio lleva haciendo 10 años. No va solo. Le acompañan siempre un grupo de chicos y chicas, todos jóvenes, que han decidido dedicar una buena parte de su verano a ayudar a los demás. Lo hacen dentro de la Fundación Amigos de Monkole, que Barrio creó hace algunos años para buscar fondos con los que sufragar la atención de personas con escasos recursos en el Hospital Monkole.
En esta ocasión, Enrique va acompañado de 10 jóvenes. La expedición partió desde Madrid el pasado día 2 de agosto y permanecerá en el país africano hasta el próximo día 24. «El perfil es muy variado. Los que están estudiando Medicina, van todos los días al hospital a echar una mano y a aprender. El resto estamos visitando los proyectos que apoyamos durante el año y a distintas familias que hemos ayudado», explica el responsable.
En los encuentros, los voluntarios no dejan de escuchar constantemente la palabra gracias. «La gente está muy agradecida. Hemos estado, por ejemplo, con varios niños a los que hemos podido curar de raquitismo. A los padres se les veía exultantes», confiesa Enrique Barrio. «Y ayer estuvimos en un orfanato donde hay 20 niños. Les ayudamos en el campo de la educación, para que los pequeños puedan estar escolarizados».
El equipo, además, está aprovechando su estancia en el país africano para hacer las fotos del tradicional calendario que venden cada año a final del curso para sacar fondos con los que cumplir los objetivos de la fundación. Está previsto que los almanaques de 2023 estén listos a finales de septiembre, mes en el que también quieren hacer un pequeño evento en España para celebrar su décimo aniversario.
Una locura
La historia de la Fundación Amigos de Monkole comenzó en 2012. «En el colegio en el que doy clase —Tajamar— estábamos colaborando con el Hospital Monkole. Hacíamos la típica campaña en Navidad para conseguir donativos», recuerda Barrio. Pero, entonces, «un chico preguntó “¿por qué no vamos a Monkole?”. En conversación con Alfa y Omega, Enrique confiesa que al principio pensó que era una locura, «pero luego fui investigando y en 2012 viajamos por primera vez».
La primera expedición estaba compuesta por tres profesores y dos antiguos alumnos. Desde entonces, no han faltado ningún año a su cita. «Cada año viene gente diferente». Con los años, el proyecto ha ido creciendo y ha trascendido a Tajamar. «En 2017 creé la fundación y en la actualidad estamos presentes en 35 colegios», concluye Enrique Barrio.