Una carrera para aprender sobre la esclerosis múltiple y ayudar a los enfermos - Alfa y Omega

Una carrera para aprender sobre la esclerosis múltiple y ayudar a los enfermos

Vuelve la carrera solidaria de los colegios Fuenllana y Andel, que donará los beneficios a la Asociación Mostoleña de Esclerosis Múltiple

José Calderero de Aldecoa
Una de las carreras solidarias de Fuenllana y Andel. Foto: Fuenllana.

Unos días antes de que se fuera a disputar la VI Carrera Solidaria organizada por los colegios Fuenllana y Andel, situados en Alcorcón, el Gobierno decretó el confinamiento nacional ante la pandemia del coronavirus y, «con todo ya preparado, no la pudimos celebrar», recuerda Carmen Calvo, directora de Comunicación de Fuenllana.

Dos años después de aquel fatídico mes de marzo, los centros educativos han recuperado este particular evento, que finalmente se va celebrar el domingo 27 de marzo a partir de las 10:40 horas. «Hay carreras para todas las edades, una baby olimpiada o incluso una paella para el que quiera después de la entrega de trofeos», detalla Calvo.

El evento está concebido como una ocasión para ahondar en la relación entre las familias, pero también como una oportunidad parar ser solidarios. De hecho, los beneficios de la cita deportiva irán destinados a apoyar el trabajo de la Asociación Mostoleña de Esclerosis Múltiple, que se creó en 1996. En España hay unas 46.000 personas diagnosticadas con esta enfermedad.

«Cada año, colaboramos con alguna entidad que trabaje en la zona. Aprovechamos para que algún miembro venga a los colegios y les explique a los alumnos la labor que desarrollan», explica la directora de Comunicación. En ediciones anteriores la carrera solidaria de Fuenllana y Andel, que suele convocar a cerca de 800 personas y recaudar en torno a los 3.000 euros, ha apoyado la labor de entidades como la Fundación Aladina, que atiende a pequeños con cáncer, o la Fundación Inocente Inocente, dedicado a niños enfermos, con discapacidad o en riesgo de exclusión social.

«También hemos colaborado en dos ocasiones con la Fundación AMÁS, que no está lejos del centro. Allí fue donde sugirieron a los de la película Campeones que los actores fueran personas con una discapacidad real. Uno de ellos, Josito, fue el padrino de la cuarta carrera solidaria», recuerda Calvo.

El cariz solidario de la carrera no es algo casual, sino «parte de nuestra propuesta de aprendizaje-servicio, que consiste en enseñar a los alumnos al mismo tiempo que se tienen en cuenta las necesidades de los demás». No es el único ejemplo de esta metodología implantada en el colegio. Por ejemplo, «el año pasado lanzamos una cocina social en Vistalegre con las alumnas del módulo de Hostelería. Producimos 300 raciones que se llevan a un comedor de Torrejón de Ardoz», concluye.