Un vía crucis especial

En la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, la Abadía benedictina de la Santa Cruz del Valle de los Caídos ha celebrado un emotivo vía crucis, tras la reapertura del Valle: en paz y recogimiento profundo, cientos de fieles recorrieron durante cuatro horas los cinco kilómetros del vía crucis del Valle, entre rocas y pinares y con 2.300 escalones de puro granito. Presidía el vía crucis, obra de Pedro Muguruza, el abad del monasterio, Dom Anselmo Álvarez, que acaba de cumplir 80 años, junto con la comunidad benedictina con sus monjes y novicios, y los niños de la Escolanía. Fue el primer vía crucis tras dos años y medio en los que ha permanecido cerrado.