«Un católico no puede comulgar con el racismo»
La Conferencia Episcopal presenta la exhortación pastoral Comunidades acogedoras y misioneras, centrada en el trabajo «con» migrantes en vez de «para» ellos
«Ante las migraciones queremos ofrecer la mirada del Evangelio, centrada en la dignidad de la persona y distinta a la nacional, la de los intereses o la ideológica», ha dicho el arzobispo de Madrid, el cardenal José Cobo, en la mañana de este lunes 6 de mayo durante la presentación en la Conferencia Episcopal Española de la exhortación pastoral Comunidades acogedoras y misioneras, centrada en la identidad y marco de la pastoral con migrantes.
Uno de los puntos claves del documento es esta palabra «con», en vez de «para», pues subraya la participación y el trabajo codo con codo junto a las personas recientemente llegadas a España. «La Iglesia ha cambiado su rostro, nuestras celebraciones tienen a muchas personas migrantes y, cuando visito las parroquias en las confirmaciones, más de la mitad de los jóvenes son migrados», ha apuntado el cardenal Cobo.
Ha vaticinado además que «el documento plantea que la Iglesia tiene una gran posibilidad de ofrecer a nuestra sociedad espacios de fraternidad y comunitarios que demuestren que son posibles». «Ante los discursos catastróficos, yo no hago más que visitar parroquias donde conviven diferentes culturas», ha añadido. Y ha celebrado que, en los templos, «cada uno se mira a los ojos y reza a través de la Virgen, es una oferta preciosa para nuestra sociedad». José Cobo ha llamado además a los católicos a participar de manera responsable en los procesos políticos preguntándose «qué votaría Jesús ante un migrante».
Una reflexión actualizada
Durante la presentación de la exhortación pastoral en la sede de la Conferencia Episcopal Española, su vicepresidente ha añadido que «este documento es fruto de un camino apasionante». Según el cardenal Cobo, uno de los objetivos principales de Comunidades acogedoras y misioneras es actualizar la reflexión que la CEE ya hizo en 2007 con el documento La Iglesia en España y los inmigrantes, incorporando en este caso «el magisterio de los últimos años de Francisco, que incorpora novedades muy válidas».
A su juicio, «cuando trabajamos en las migraciones, necesitamos puntos de referencia desde donde afrontarlas». Algo que ofrece este documento para cuya redacción «hemos contado con todos los delegados y delegadas de migraciones de las diócesis, que han aportado su visión y su subrayado». Y ha confesado que, cuando la Conferencia Episcopal comenzó a escribir el documento «salieron muchas ideas y muchas páginas», pero se acometieron diferentes procesos de reflexión para sintetizarlo y que sea aplicable en las diócesis como un manual sencillo. «Ha pasado muchas vueltas de lavadora para ir adelgazando».
«Un católico no puede comulgar con el racismo»
Xabier Gómez, director del departamento de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española, ha comenzado su intervención en su sede dando «las gracias a las personas migrantes que llevan muchos años revitalizando nuestra sociedad y nuestra Iglesia».
Ha valorado cómo la exhortación busca ofrecer «una pedagogía sobre las migraciones leída con la mirada de la Iglesia». Y ha aconsejado «a las personas preocupadas por la identidad de los católicos» que esta no consiste en «tener un pasaporte» sino en «ser capaz de identificarse con Jesucristo y con los hermanos más vulnerables». «Cualquier otra cosa se quedaría corta», ha sentenciado.
Gómez ha celebrado que «el pueblo de Dios es numeroso y con su capilaridad está presente en todos los barrios». Y le ha encargado «que contribuya a generar espacios seguros». «Frente al intento de hacernos consumir la droga del miedo que puede dejar anestesiada la conciencia de la gente, sobre todo en tiempo de elecciones, nosotros proponemos la vacuna de la hospitalidad», ha reivindicado. Y ha insistido en que «un católico no puede comulgar con el racismo y la aporofobia».
«Traemos diversidad en armonía»
Finalmente, Melani Flores, feligresa de la madrileña parroquia de San Milán y San Cayetano y de origen peruano, ha reivindicado cómo «muchas personas vinieron aquí haciéndose responsables de sus sueños y comprometiéndose a integrarse a esta nueva casa que abre sus puertas».
Ella es voluntaria de Educadores de la calle y Talleres de primeros pasos, dos iniciativas con personas afrodescendientes en Lavapiés que buscan su acompañamiento e inserción. «Quiero dar una buena noticia, la de que traemos una diversidad en armonía», ha celebrado. Y ha concluido su intervención recalcando que «la Biblia misma habla de la historia de la Salvación y del Éxodo y no deben ser ajenas para nosotros».