Si se los cruza, le pegarán la estrella que anuncia la Navidad - Alfa y Omega

Si se los cruza, le pegarán la estrella que anuncia la Navidad

Los niños de Madrid recorrerán este sábado sus calles felicitando a los transeúntes gracias a Sembradores de Estrellas, la iniciativa de OMP para recordar el verdadero sentido de esta fiesta

Rodrigo Moreno Quicios
Víctor González con los niños de Nuestra Señora de los Álamos. También es su arcipreste.
Víctor González con los niños de Nuestra Señora de los Álamos. También es su arcipreste. Foto cedida por Víctor González.

Ainhoa tiene 12 años y está en primero de Confirmación. En Navidad no piensa volar al Congo ni atravesar la selva amazónica, pero es misionera. Este sábado anunciará el Nacimiento de Jesús por las calles de Madrid como el año pasado, «cuando fui a Sembradores de Estrellas». Es la gran campaña que Obras Misionales Pontificias organiza para que los chavales den a conocer el sentido de esta fiesta y cubran con pegatinas a los peatones que se pongan a tiro de la Buena Noticia.

Esta joven feligresa de Nuestra Señora de los Álamos se juntará en la parroquia de San Bernabé con otros niños procedentes de las parroquias del arciprestazgo del Dulce Nombre de María. «Recuerdo que fue muy bonito conocer a más gente. Cantamos villancicos, escuchamos el Evangelio y el padre Víctor nos encargó repartir estrellitas a las personas que estaban tristes y decirles: “Dios va a nacer, feliz Navidad”», narra esta veterana. Por alusiones, Víctor González, su párroco y arcipreste, nos adelanta que «este año vamos a darle un tinte de esperanza por el año jubilar» que está a punto de concluir.

Alumnos concepcionistas en San Lorenzo. Aprovecharon su cercanía a Segovia para organizar un acto conjunto.
Alumnos concepcionistas en San Lorenzo. Aprovecharon su cercanía a Segovia para organizar un acto conjunto. Foto: Vicenta Benítez.

Aparte de juntarse con feligreses de varias parroquias, «este año, en el acto diocesano, estarán con nosotros otros niños de la Delegación de Misiones». González detalla que en esta pequeña celebración, «los niños asumen un compromiso». Es real, tangible y aterrizado y no nos vendría mal a los adultos suscribirlo. Consiste en tres preguntas: «¿Estás dispuesto a vivir con fe y celebrar con alegría el nacimiento de Jesús? ¿Estás dispuesto a ser generoso estos días, ayudar a tu familia y preocuparte por los que están tristes? ¿Estás dispuesto a anunciar con alegría que Jesús ha nacido poniendo una estrella a las personas por la calle y por el barrio?». A lo que los chavales responden con un entusiasta y contagioso: «¡Sí, estoy dispuesto!».

También charla con nosotros Valeria, de 11 años, en primero de Comunión y quien acudirá este sábado a Sembradores de Estrellas por primera vez. «Me sé lo mismo que ha dicho Ainhoa», reconoce con sencillez. También consiste en eso: una anuncia y la otra escucha. El sábado le tocará ese rol a ella, pues ya le han explicado en la parroquia «el Nacimiento de Jesús». En su caso, seguramente la acompañe su abuela, que «siempre viene conmigo a las catequesis familiares».

En la parroquia ya han formado a esta nueva hornada de evangelizadores. La primera pauta que les han dado es: «Si nos dan monedas, ¡no aceptamos!». Entre los sucesos esperables —ocurre año tras año—, Víctor González pronostica que seguramente «lleguen cinco chavalillos y al mismo abuelete le pongan cinco estrellas y nos partamos de risa».

Ainhoa y Valeria, las dos estrellas del reportaje, tienen la misión de anunciar a los mayores.
Ainhoa y Valeria, las dos estrellas del reportaje, tienen la misión de anunciar a los mayores. Foto: Víctor González.

Buenos «sinvergüenzas»

La concepcionista misionera de la Enseñanza Vicenta Benítez, coordinadora de pastoral de su colegio en Hortaleza, cuenta que los alumnos de la capital y de Segovia ya celebraron el pasado fin de semana este mismo evento, desplazado en el calendario por motivos prácticos. «Nos juntamos en San Lorenzo de El Escorial unos 260, entre alumnos y monitores». Los alumnos del centro de allí los acogieron «y tuvimos una celebración en la capilla en la que hablamos de cómo hemos recibido la estrella, que es Jesús, y cómo se la damos a los demás». Después, la lección práctica. «Nos distribuimos por el pueblo, íbamos anunciando la Navidad a la gente que nos encontrábamos por la calle y les pegamos las pegatinas que nos da OMP». Un gesto que, a pesar de que la localidad esté acostumbrada a recibir turistas, sorprendió a los vecinos por el tono que marcaron estos visitantes. «Nos preguntaban quiénes éramos, qué hacíamos y querían cantar con nosotros», explica. «Como los niños tienen menos vergüenza, lo hacen sin problema».

«Llevaríamos al menos 10.000 pegatinas», estima Benítez. 7.000 menos que los habitantes del pueblo, por lo que «sobraron muy pocas» y el mensaje quedó claro: «Si no fuera por el Nacimiento de Jesús, no celebraríamos estas fiestas». Benítez invita esta Navidad a «no quedarse solo con las vacaciones y las pantallas» sino anunciar a todas partes. ¿Dará esta cita como fruto más misioneros ad gentes? Es pronto para saberlo, pero insiste en que «lo nuestro es sembrar».